Las sensaciones de los últimos encuentros, así como la reciente derrota frente al Atlético de Madrid, han dejado cierto regusto amargo entre la afición, si bien no pueden ocultar que el Athletic está en una buena línea si se hace una lectura global de la temporada. Todo es susceptible de mejora, por supuesto, pero los números, irrefutables, así lo corroboran. De hecho, el conjunto rojiblanco ocupa actualmente la séptima posición en liga, a dos puntos del Rayo Vallecano, que es sexto, y a cinco del Betis, quinto. De acabar así la temporada y en caso de que Barcelona o Real Madrid ganen la Copa, los bilbainos regresarían a Europa tras cinco temporadas deambulando por el desierto, claro que la mejor forma de volver sería conquistando, 39 años después, el torneo del K.O. Sea como fuere, el equipo está a día de hoy en plenas condiciones de alcanzar el objetivo que, de manera pública, se fijó por parte del club en una rueda de prensa singular, no cabe duda, con el presidente, Jon Uriarte, el entrenador, Ernesto Valverde, y el capitán, Iker Muniain, compareciendo de manera conjunta.
Contar con la figura de un técnico como Txingurri, recientemente renovado hasta junio de 2024, ha sido casi siempre garantía de éxito. De hecho, en sus dos anteriores etapas en el banquillo de San Mamés, solo una vez no clasificó al Athletic para disputar competición europea. Fue en la temporada 2004-05. No ha tenido más fallos un entrenador que, si bien no acostumbra a manejar grandes registros ante los equipos más fuertes de la liga, aquellos que han obtenido clasificaciones europeas, se hace fuerte ante el resto de conjuntos.
En las nueve temporadas sometidas a análisis, todas las completadas desde la 2013-14, y obviando la actual, que aún no ha finalizado, son doce los rivales del Athletic que han logrado pasaporte continental: Barcelona, Real Madrid, Atlético de Madrid y Sevilla han hecho pleno, nueve de nueve; Villarreal, ocho; Real Sociedad, cinco; Valencia y Betis, tres; y una Celta, Getafe, Granada y Espanyol.
Entre las campañas 2013-14 y 2016-17, las cuatro de su anterior etapa de Valverde en Bilbao, el equipo logró 13, 12, 10 y 13 puntos, respectivamente, sobre 36 posibles, ante los otros seis equipos que ocuparon puestos europeos al término de la liga, tramo en el que el Athletic siempre acabó en los siete primeros puestos de la clasificación. Porcentualmente, los rojiblancos sumaron entre el 28% y el 36% de los puntos frente a los conjuntos europeos. Unas cifras que en la comparativa son muy inferiores a las obtenidas ante aquellos clubes que no se clasificaron para jugar en Europa (puestos entre el 8º y el 20º). De hecho, salvo en el curso 2014-15, en el que los leones firmaron un muy mal arranque de liga, siempre lograron 50 o más puntos sobre 78 posibles (26 enfrentamientos). En concreto: 53 puntos (68%) en la 2013-14; 43 (55%) en la 2014-15; 52 (67%) en la 2015-16; y 50 (64%), en la 2016-17.
En la presente temporada
Esta campaña, consumida ya la primera vuelta del campeonato además de tres jornadas de la segunda, el Athletic se encuentra en una línea similar a las de las cuatro temporadas citadas anteriormente. La disputa de 22 fechas supone tiempo suficiente como para que la muestra adquiera cierto peso y validez y, aunque no sea definitivo, puede aportar algo de luz a la situación real. Hasta la fecha, ha sumado solo 4 puntos sobre 21 posibles (19%) ante los equipos que le superan en la clasificación (7 enfrentamientos), pero 28 sobre 45 (62%) frente al resto.
Como en todo, eso sí, existen matices. Por ejemplo, que el conjunto rojiblanco únicamente ha sido capaz de ganar a dos de los catorce primeros clasificados de la liga: Rayo y Villarreal; claro que a diferencia de lo ocurrido en temporadas pretéritas, hasta el momento no se ha dejado ni un solo punto ante los tres equipos que en la actualidad ocupan posiciones de descenso. Al Elche le ganó con solvencia en el Martínez Valero (1-4) y frente al Cádiz y al Valencia ha hecho un pleno de doce puntos, fruto de sus respectivas victorias tanto en San Mamés como en el Nuevo Mirandilla y Mestalla.
Cinco años fuera de Europa
Desde la salida de Valverde rumbo al Barcelona en el verano de 2017, el Athletic no ha vuelto a clasificarse para jugar en Europa. Eso sí, los registros obtenidos ante los siete equipos que en cada una de esas cinco campañas se metieron en Europa fueron ligeramente superiores a los logrados con Valverde, contabilizándose además siete rivales y no seis, pero peores frente a aquellos que acabaron la liga entre el octavo y el vigésimo puesto. Y ha sido en esos enfrentamientos en los que al conjunto rojiblanco se le ha negado la posibilidad de volver a pasear su nombre por Europa.
En la temporada 2017-18, con José Ángel Ziganda en el banquillo, el Athletic logró 16 puntos sobre 42 posibles (38%) frente a los equipos que firmaron su clasificación europea, y 27 de 72 posibles (también un 38%) contra el resto.
Mejoró sus registros en las cuatro posteriores campañas, pues empeorar el décimo sexto puesto firmado con el navarro habría resultado desolador, pero nunca obtuvo más de un 60% de puntos frente a los conjuntos no europeos y, como tal, tampoco alcanzó los suficientes números como para ocupar uno de los siete primeros puestos de la clasificación.
En el curso 2018-19, que arrancó con Eduardo Berizzo y acabó con Gaizka Garitano, el Athletic logró 12 puntos sobre 42 (29%) frente a los siete primeros, y 41 de 72 (57%) ante los no clasificados para Europa. En las tres temporadas siguientes, sus porcentajes frente a este segundo grupo no superaron nunca el 55%. En concreto, en la 2019-20 se quedó en un 49% (35 de 72), 42% (30 de 72) en la 2020-21 y 54% (39 de 72) en la 2021-22.
Así, al Athletic del presente debería bastarle con mejorar ligeramente sus números ante los equipos que le superan en la tabla y mantener sus resultados frente al resto para volver a pasear su nombre por Europa. De momento, está en la buena línea.