El aumento de gasto en Defensa propuesto por el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha sumado el apoyo de PP, Vox y Cs, pero tiene la oposición tajante de Unidas Podemos, mientras que otros socios parlamentarios como EH Bildu o Más País han mostrado sus reticencias y el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, no lo ve con malos ojos.
El portavoz del PSOE en el Congreso de los Diputados, Héctor Gómez, ha dicho que el Gobierno cumplirá con el compromiso de aumentar el gasto en Defensa "independientemente de las consideraciones de otros grupos", en referencia al rechazo de Unidas Podemos.
En una rueda de prensa celebrada en el Congreso, el portavoz socialista ha dicho que este aumento del gasto de Defensa hasta el 2% del PIB es un compromiso adquirido en la OTAN "para tener capacidad de respuesta ante desafíos como el que estamos viviendo en Ucrania" tras la invasión de esta país por parte de Rusia.
"Ese compromiso del 2 % se va a cumplir, independientemente de las consideraciones de otros grupos", ha añadido en referencia a Unidas Podemos, que ha sido tajante al negarse y ha señalado que no hay fisuras dentro del grupo en este sentido.
Pese a ello, el portavoz socialista confía en contar con el apoyo de todos los grupos para aumentar el gasto en Defensa al ser "una cuestión relevante" que, en su opinión, "no es una decisión más".
"Es un compromiso que el presidente del Gobierno ha adquirido y se va a cumplir", ha insistido Gómez, que ha indicado que esta medida se tomará a lo largo de esta legislatura, sin concretar más, ya que ha explicado que es un asunto que tendrá que diseñar el Gobierno dentro de la "arquitectura presupuestaria".
Preguntado por los motivos del rechazo de Unidas Podemos, ha dicho que es una cuestión que tendrá que aclarar este grupo, pero ha confiado en que "impere el entendimiento" en todos los casos, especialmente con los socios del PSOE en el Gobierno de coalición.
"Siempre hemos defendido la estabilidad del Gobierno, la continuidad del Gobierno de coalición (...) pero ante situaciones excepcionales el Gobierno de España debe estar a la altura", ha declarado.
Por otro lado, ha destacado que el Gobierno afronta dos semanas por delante "muy importantes" para recabar apoyos para el plan de respuesta a las consecuencias de la guerra en Ucrania hasta su aprobación, prevista en el Consejo de Ministros del 29 de marzo .
El Ejecutivo ya ha iniciado contactos con los agentes sociales y tiene previsto hacerlo ahora con los grupos parlamentarios para recabar sus propuestas, unos encuentros en los que estarán presentes ministros como Félix Bolaños, Nadia Calviño o Teresa Ribera.
Fuentes socialistas informan de que el orden de las reuniones con los grupos seguramente será de mayor a menor representación, empezando por el PP, y añaden que se tratarán medidas no sólo económicas sino también relacionadas con otros aspectos como la defensa o la gestión diplomática.
Los portavoces parlamentarios se han referido este martes a esa propuesta de Sánchez, con puntos de vista totalmente contrarios.
Desde la derecha han dejado claro que les parece correcto que el presupuesto en Defensa alcance el 2% del PIB y lo ha resumido el PP en que Sánchez "cuando rectifica acierta".
Vox ve "necesario" ese aumento, y no solo porque es un compromiso con los aliados de la OTAN, sino también porque es "bueno en sí mismo", ya que se dan "beneficios colaterales" como las mejoras en la tecnología.
Ciudadanos también está de acuerdo con Sánchez y se cuestiona cómo pueden no estarlo sus socios de gobierno "con la que está cayendo". Esa oposición la ha mostrado de forma tajante Aina Vidal (En Comú Podem): "No lo vamos a apoyar. Punto".
Otros portavoces no han mostrado ni apoyos tan claros como los de la derecha ni rotundas oposiciones como la de Vidal.
Así, Rufián ha apuntado que el presupuesto anual en Defensa "ya es muy alto" en España, de unos 20.000 millones de euros, aunque al mismo tiempo opina que la guerra en Ucrania obliga a la izquierda a ir "más allá de la pancarta" y "hacer un debate serio".
"A veces los intereses de tu país tienen que pasar por encima de tus propias convicciones", ha contestado Rufián acerca de si lo apoyaría con su voto, para huir de la ambigüedad, pero sin adelantar qué decidirá su grupo si se votara.
Desde Más País ven otras "prioridades" de inversión por encima de las de Defensa, como desde Compromís, que prefieren que se dedique a gasto social, y desde la CUP.
Reticencias también muestra Bildu, que dice que lo que se sume a Defensa se resta de otras "necesidades acuciantes", como las políticas sociales, económicas y culturales.
Para el PDECat Sánchez tiene que explicarlo más y buscar la complicidad de los grupos, aunque "es fácil" que su grupo lo apoyara si se hace con claridad y transparencia.
Tampoco se ha opuesto Junts, aunque cree que los ejércitos españoles deberían reestructurarse antes de que se plantee el aumento presupuestario.
Otras propuestas de Sánchez, como la rebaja fiscal que abarate los carburantes y desvincular el gas del sistema energético, han tenido una acogida más uniformemente favorable por la mayoría de los portavoces. PP, Vox y Cs han valorado la bajada de impuestos y han animado a aplicar otras cuantas.
Otros, en cambio, aunque tampoco se han opuesto, han matizado que apoyan esa iniciativa en concreto, coyuntural y en beneficio de los consumidores, pero al mismo tiempo quieren que aumenten los gravámenes a las empresas eléctricas o a las grandes fortunas.
Las consecuencias de la guerra tienen que recaer más sobre las grandes empresas y los millonarios que sobre las pymes, los trabajadores y las personas vulnerables, según la idea expresada por Pablo Echenique (UP), similar a las expuestas por Rufián, Aizpurua y Errejón.