El Ayuntamiento de Vitoria ya dispone de un mapa de la ciudad con 6.200 puntos con grafitis. Ahora, persigue a 29 grafiteros "muy activos" –puntualiza el alcalde– a los que pueden atribuirse hasta 90 pintadas a cada uno. Se trata en su mayoría de firmas que Gorka Urtaran asegura que hasta donde él sabe, son personales y no de grupo.
Para identificar a los autores, ha contratado a grafólogos, peritos y abogados que ya han puesto nombre y apellidos a cuatro de los grafiteros en una primera fase.
Multa básica y limpiar las pintadas
Los autores tendrán una multa básica de entre 1.500 y 3.000 euros por el daño causado. Además, tendrán que acceder a limpiar lo ensuciado y comprometerse por escrito a no realizar más pintadas en Gasteiz. De lo contrario, las sanciones irán a más y pueden acabar en denuncias en los juzgados.
Deja claro Urtaran que esta estrategia va contra los grafitis que ensucian y deslucen la ciudad. "No se trata de plantar cara al arte urbano, sino a las pintadas, fundamentalmente firmas, que son un acto vandálico", subraya el alcalde.
Grafitis que normalmente se hacen en persianas de comercios, soportales de comunidades de vecinos y edificios del patrimonio de la ciudad. Destaca por su cantidad el barrio de Lakua-Arriaga.