El Baskonia logró mantener ante el Estrella Roja su imbatibilidad en la Euroliga y continuar así con uno de sus mejores arranques que se le recuerdan en el torneo continental al imponerse en las tres primeras jornadas de competición. Ante la inspiración de Markus Howard, que volvió a protagonizar una exhibición anotadora al sumar 30 puntos en 24 minutos, y el acierto exterior del equipo en general, al Baskonia le valió con completar una buena actuación defensiva en la segunda parte para cerrar un triunfo que parecía que iba a ser más complicado tras una primera mitad muy blanda atrás.
El Baskonia suma su tercera victoria ante el Estrella Roja
Desde la previa del encuentro se intuía que la principal amenaza del Estrella Roja frente al conjunto alavés podía ser su juego interior, aprovechando la baja de Steven Enoch, y así se confirmó en los compases iniciales del primer cuarto. El conjunto de Peñarroya, que empezó con un reconocible quinteto compuesto por Thompson, Marinkovic, Giedraitis, Hommes y Kotsar, dio demasiadas facilidades a Mitrovic y a Bentil, que anotaron entre los dos los primeros 19 puntos del conjunto serbio sacando partido de la tibieza defensiva de Hommes y Kotsar. En el lado contrario de la cancha, la sinergia entre Thompson y Kotsar, sumada al acierto de Marinkovic desde el perímetro, permitió a los locales mantenerse a una distancia prudencial (17-24) hasta que llegó la explosión de Markus Howard entre el final del primer cuarto y el inicio del segundo.
El talentoso exterior estadounidense anotó en un abrir y cerrar de ojos 14 puntos consecutivos para su equipo a base de acierto exterior, logrando así darle la vuelta al marcador (31-29) y sorprender a un Estrella Roja en el que Dobric tomó el relevo de Bentil y Mitrovic en la faceta anotadora. La inspiración de Howard, que cerró la primera mitad con nada menos que 19 puntos, permitió esconder los cuantiosos desajustes defensivos del Baskonia, que permitió que un equipo de bajos números anotadores como el Estrella Roja alcanzara los 47 puntos al descanso y que se marchara cinco tantos arriba al vestuario. La desigual batalla por el rebote, faceta en la que el conjunto serbio fue superior, también jugó en contra de los intereses azulgranas, que concedieron excesivas segundas oportunidades a su rival.
Reacción tras el descanso
Para tener alguna opción de llevarse el triunfo, Peñarroya tuvo claro que el Baskonia necesitaba subir varias marchas en defensa en la segunda mitad, y así se lo debió hacer saber a sus jugadores en el intermedio, ya que en el tercer cuarto el Estrella Roja se encontró con mayores dificultades para anotar y Bentil y Mitrovic prácticamente desaparecieron del encuentro. Los focos, por el contrario, fueron a parar a Daulton Hommes, que ajustó su mirilla y castigó desde el perímetro con tres importantes triples que permitieron al Baskonia sacar partido de su mejoría defensiva, darle la vuelta al partido y llegar al cuarto decisivo por delante (59-57) tras dejar a los de Belgrado en únicamente diez puntos en el tercer parcial.
El acierto en el triple, que volvió a ser la principal arma ofensiva del Baskonia, permitió a los gasteiztarras construir una valiosa renta de ocho puntos al poco de comenzar el último cuarto gracias a dos triples de Darius Thompson y otro de Costello (68-60). El Estrella Roja se negó a perderle la cara al partido y siguió peleando, más por ganas que por ideas y recursos ofensivos, aunque el acierto de cara al aro volvió a estar del lado del Baskonia. Howard, con otro triple espectacular desde el logo de la Euroliga, parecía cerrar el choque al elevar la ventaja a dos dígitos a cinco minutos del final del encuentro, pero se encontró con la resistencia de Petrusev, que con ocho puntos seguidos para su equipo dejaba el encuentro todavía vivo con el 78-72. Sin embargo, no entraba en los planes azulgranas, y mucho menos de Markus Howard, dejar escapar su tercer triunfo en tres partidos en la Euroliga. Una buena canasta de Kotsar seguida de otro triple del estadounidense volvió a elevar el colchón a los once puntos para sentenciar el choque a falta de dos minutos, el conjunto de Jovanovic tiró la toalla y Howard puso la guinda a su exhibición con otro triple más para alcanzar los 30 puntos y llevar el júbilo a la grada del Buesa Arena.
La fiesta y el momento de felicidad continúa en el conjunto baskonista, que tendrá un reto aún más exigente el viernes contra el Olympiacos en busca de mantener su imbatibilidad.