Los movimientos en la secretaría técnica del Baskonia se suceden a un ritmo frenético. El pasado viernes saltó la noticia del fichaje del base Markus Howard, que el club confirmaría dos días después, este domingo, justo cuando se produjo el terremoto de la salida de Simone Fontecchio y justo un día más tarde, este lunes, también ha salido a la luz el interés del conjunto azulgrana por Ignas Brazdeikis.
Thompson sería el complemento ideal a un killer como Howard. Se trata de un combo estadounidense con pasaporte comunitario ya que está casado con una italiana, lo que permite su llegada a Gasteiz, ya que el Baskonia ha cubierto las dos plazas de extracomunitario con Hommes y Howard, de 1,93 metros y 27 años que todavía no tiene experiencia al más alto nivel en la Euroliga.
El director de juego, que esta pasada temporada ha militado en el Lokomotiv Kuban, además de una notable visión de juego y ser un base más cerebral que Howard, también tiene muchos puntos en sus manos. Se trata además, de un base sumamente atlético y con una enorme facilidad para romper las defensas contrarias.
Desde luego, Howard y él formaran un tándem muy completo, ambos anotadores pero con perfiles distintos y del agrado ambos del que será su técnico Joan Peñarroya, ya que este último responde también al prototipo de base rápido y físico, capaz también de defender a jugadores algo más corpulentos.
Pese a haber firmado el pasado verano un contrato de dos temporadas con el Lokomotiv Kuban, Thompson no quería seguir en Rusia. Desde luego su calidad le ha servido para encontrar rápidamente acomodo ya que además del Zalgiris y el Baskonia había más equipos interesados en hacerse con sus servicios. Sin embargo, el Baskonia se movió rápidamente en su momento y encarriló una operación que podría cerrarse en cuestión de horas. El jugador quiere y el club también está interesado. Ambos están condenados a entenderse.
De cerrarse esta semana su fichaje, tal y como así parece, el Baskonia se haría con un jugador muy completo que aporta en distintas facetas. Buena prueba de ello es que en esta pasada campaña con el Lokomotiv Kuban promedió 13,2 puntos, 3 rebotes y 5,8 asistencias en la Eurocup con un 70% de acierto en tiros de dos y 33% en triples. Un lujo.