El Baskonia se aseguró ante el Joventut ser cabeza de serie en la Copa del Rey en un choque igualadísimo en el que los gasteiztarras, espoleados por su público, fueron capaces de reponerse a las bajas de Howard y Henry y llevarse el triunfo en el último suspiro con Marinkovic como base y un renacido Giedraitis.
El arranque del encuentro tuvo dos nombres propios: Darius Thompson por parte del Baskonia y Ante Tomic del lado del Joventut. El base estadounidense, acompañado por Giedraitis, Sedekerskis, Hommes y Kotsar en un alto quinteto inicial planteado por Peñarroya, anotó los nueve primeros puntos para los locales, mientras Ante Tomic, con ocho tantos para los verdinegros en el primer cuarto sacaba petróleo en la pintura frente a la permisiva defensa interior azulgrana.
No fue hasta el minuto cinco del encuentro (9-9) cuando Thompson encontró colaboración anotadora con un triple de Giedraitis, y a partir de ahí el resto de compañeros se sumaron y consiguieron poner tierra de por medio antes del final del primer cuarto.
Concretamente, Hommes y Costello, don dos triples del primero y cinco tantos del segundo, protagonizaron un parcial de 11-0 que habría permitido al Baskonia cerrar el primer cuarto con dobles dígitos de no ser por un regalo de Dani Díez que facilitó una canasta de Guy sobre la bocina (25-17).
El alero madrileño, eso sí, reparó los daños en el arranque del segundo parcial, en el que fue el encargado de mantener al equipo a flote con dos triples después de que el Joventut se acercara a tres puntos mediante una diana exterior de Vives y una canasta de un Parra muy sólido durante todo el choque.
Thompson y Marinkovic tuvieron que marcharse al banquillo en los minutos previos al descanso con dos faltas cada uno y el Joventut, con Tomic de vuelta al parqué, aprovechó ese tramo más espeso de los azulgranas para reducir distancias y castigar algunos errores defensivos evitables. Mientras Peñarroya se desgañitaba en la banda, el espigado pívot del Joventut, a quien su equipo buscó constantemente con balones interiores, puso a los visitantes a un punto y solo Giedraitis con dos buenas acciones bajo el aro mantuvo al Baskonia por delante en el electrónico al fin del segundo cuarto, aunque por la mínima (39-38).
Tensión hasta el final
Al regreso de vestuarios, el propio Giedraitis se echó el equipo a la espalda y junto a Costello lideró un parcial de 8-0 nada más empezar que permitió a los gasteiztarras tomar algo de oxígeno y alejarse en el electrónico (47-40).
El Baskonia subió una marcha en ataque y por momentos dio la sensación de que podía romper el encuentro, pero la defensa no acompañó y el Joventut aguantó el tipo, impidiendo que los locales alcanzaran la barrera de los dobles dígitos de ventaja. Marinkovic, con una jugada de canasta y tiro libre adicional, puso a los azulgranas nueve arriba con el 59-50, pero acto y seguido llegó la respuesta de Kyle Guy.
El tirador norteamericano, que alcanzó los 12 puntos en el tercer cuarto, entró en calor y anotó tres triples en acciones consecutivas para echar por tierra el colchón baskonista en un abrir y cerrar de ojos y situarse a solo tres tantos, que fue la diferencia con la que se llegó al cuarto decisivo después de que ambos conjuntos se intercambiaran golpes en los compases finales del tercer parcial (67-64).
En la reanudación, los nervios comenzaron a florecer entre los aficionados azulgranas cuando Ellenson acercó al Joventut a solo un tanto y Thompson cometió su cuarta falta con seis minutos todavía por disputarse.
El propio Ellenson situó a los catalanes por delante con dos tiros libres y Feliz hizo saltar las alarmas con una acción de dos más uno (71-75). Kotsar y Costello tras un buen pase de Kurucs devolvieron las tablas al electrónico, pero los gasteiztarras no encontraban la fluidez ofensiva del tercer cuarto y Tomic, de nuevo haciendo trizas la defensa interior gasteiztarra, puso a su equipo 75-80 arriba.
Se complicó aún más el duelo con la eliminación de Thompson a 1:23 del final con 77-81, pero el Baskonia no se rindió y con Marinkovic ejerciendo como base fue capaz de salvar el triunfo en un final agónico.
El serbio dio esperanzas a los locales con un triple, llegó la respuesta de Tomic y el propio Marinkovic anotó el 82-83 en una rápida bandeja mal defendida. Los de Carles Duran erraron la siguiente acción, Hommes recogió el rebote y Feliz cometió falta sobre Giedraitis cuando se dirigía hacia la canasta rival en transición.
Rokas no perdonó desde la personal y el Joventut no aprovechó su última posesión, en la que se lo jugó todo a un triple lejano de Guy que no entró. Al final, aunque, con sufrimiento, objetivo conseguido (84-83).