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Navarra

El baztandarra que llevó el bertso al Congreso de EEUU

El bertsolari baztandarra Jesús 'Jess' Goñi Telletxea en su casa de Reno, en Nevada. Foto: Euskalkultura.com
El bertsolari baztandarra Jesús 'Jess' Goñi Telletxea en su casa de Reno, en Nevada. Foto: Euskalkultura.com

El tesón de Jesús "Jess" Goñi Telletxea, residente en el condado de Washoe (Reno, Nevada), para seguir la tradición vasca del bertsolarismo le ha llevado por Arizona, Idaho, California y Nevada, e incluso al Congreso de los Estados Unidos. En marzo, Goñi fue galardonado con el Tributo Especial Bertsolari por la North American Basque Organizatión, la Asociación Vasco Norteamericana, y el diario The Nevada Independent le dedicó un extenso reportaje.

Su talento le ha ayudado a mantener viva su lengua y la cultura vasca, sobre todo en el norte de Nevada y la región de la Gran Cuenca (estados de Nevada, Utah, Oregón, Idaho, Wyoming y California), donde se asentaron muchos emigrantes vascos tras salir de Euskal Herria por la dura persecución y recesión del franquismo.

el bertsolarismo Es una modalidad de improvisación donde se pide al cantante que interprete estrofas (bertsoak) sobre temas específicos y los ajuste a la estructura del verso tradicional. Los bertsolaris como Jesús Goñi, abordan temas diversos que van desde lo conmovedor y dramático hasta lo humorístico y lúdico.

Con un esquema de rima específico y en euskera, los bertsolaris suelen comentar que al ser traducidas, las canciones pierden gran parte de su significado original y su intención artística. Los escenarios donde se practica el bertsolarismo van desde grupos informales de amigos compartiendo una comida hasta actuar ante poderosos políticos del Congreso de los Estados Unidos.

Como cita The Nevada Independent (TNI) Todo comenzó para Jesús Goñi cuando comenzó a cantar con su abuelo mientras crecía en el País Vasco, en las colinas de Navarra, una zona de los Pirineos entre España y Francia. Uno de los dramas más conocidos sufridos por los vascos sucedió en Gernika, en plena Guerra Civil española, al cumplirse 85 años que se conmemoran estos días del bombardeo de la histórica villa foral por la aviación alemana colaboradora del golpìsta Francisco Franco .

La tragedia no se olvida y ha inspirado danza, escultura y pintura, sobre todo la famosa obras titulada "Guernica" de Pablo Picasso. El árbol de Gernika, el roble plantado en la plaza de la villa de Gernika que representa la independencia y singularidad del Pueblo Vasco sigue en pie a pesar del bombardeo como símbolo de la resistencia y la esperanza vascas de un futuro en libertad.

El general Francisco Franco era un militar español que protagonizó un golpe de estado contra la República legalmente constituida y pretendía eliminar a cualquiera que no siguiera su ideología totalitaria. Desde que se convirtió en el dictador de España al final de la Guerra Civil en 1939 hasta su muerte en 1975, a los vascos se les prohibió hablar su idioma, reprimió su cultura y en muchos casos fueron torturados o asesinados por sus creencias políticas.

El genocidio cultural, la guerra, persecución política, el terror de la Segunda Guerra Mundial y la falta de oportunidades de trabajo, muchos vascos emigraron a otros países, incluyendo Argentina, México, Chile y los Estados Unidos. Trajeron consigo su cultura, idioma y tradiciones, plantando retoños del árbol de Gernika en numerosos lugares de los Estados Unidos.

el pastor bertsolari Jesús Goñi marchó a Estados Unidos siendo adolescente, igual que muchos vascos en busca de oportunidades de trabajo y mejor remuneradas, con lo que recibían un dinero que les permitía ahorrar y ayudar a sus familias en Euskal Herria. Trabajo de pastor de rebaños de ovejas en Arizona, y finalmente decidió establecer su hogar en los Estados Unidos donde trabajó en la industria ganadera y en la construcción.

En tierras extranjeras, los inmigrantes vascos conservaron su propia cultura y el sentimiento de origen que se ven ahora en el valle de Washoe, Elko y otras partes de Nevada. Los vascos se alojaban en pensiones vascas que se convertirían en muchos de los restaurantes vascos por los que el estado es conocido en la actualidad. "Comían carnes asadas, alubias, sopas y guisos y bebían vinos tintos y ponches de picón. Y tocaban música vasca e interpretaban la bertsolaritza, la improvisación de versos". dice TNI.

Cuando llegó por primera vez a Estados Unidos, no cantaba mucho, no había oportunidad de verse con otros vascos en Arizona, al trabajar aislados con rebaños de miles de ovejas y casi nunca había nadie con quien compartir su propia cultura. Jesús Goñi pensó que Arizona es un estado demasiado caluroso, se trasladó a Idaho, donde, esta vez sí, conoció a más vascos e hizo amistad con bertsolaris antes de establecerse en el área de Reno, en Nevada, en los años 80.

En Euskal Herria a la muerte de Franco en 1975, los vascos fueron reviviendo su lengua propia, el euskera, y reconstruyendo su cultura. Mientras tanto, Jesús Goñi creaba un grupo de bertsolaris que actuaban en muchas ocasiones, desde picnics (fiestas) vascos hasta funerales, ganando premios en Boise, Gardnerville y San Francisco.

Así llegó a actuar con otros en el Congreso de los Estados Unidos en 1992, donde manifestó que "nunca en su vida pudo imaginar que llevaría sus bertsos a Washington". Hoy en día, Jesús Goñi sigue actuando allí donde es requerido. El pasado septiembre, cantó en honor a la estatua del Pastor Vasco cuando fue trasladada del Nugget Casino Resort, antes propiedad de John Ascuaga, otro emigrante vasco de segunda generación, al campus de la Universidad de Reno.

En marzo, Goñi fue distinguido con el Tributo Especial Bertsolari en la reunión anual de la Organización Vasca Norteamericana en San Francisco. En esa ocasión, dijo que ha tenido multitud de recuerdos actuando para personalidades estadounidenses, pero sus favoritos como bertsolari son las que tienen lugar después de sus actuaciones, "cuando la gente se reúne para comer y beber, a menudo, tocan instrumentos típicos vascos y nos turnamos para improvisar bertsoak unos y otros". "Esos son los buenos recuerdos, cantar mucho... cuando encuentras gente que no crees que vas a encontrar", afirma.

Jesús Goñi nació en el caserío Barbenekoborda de Oronoz y ejerció de pastor desde pequeño hasta los quince años. En 1965 marchó a Mesa (Arizona) con un contrato de trabajo de tres años y medio. Regresó a casa, con la intención de volver a América, pero le tocó el servicio militar donde conoció a Anjel Larrañaga y empezó a cantar bertsos.

En 1970 volvió a los Estados Unidos, a Ruppert (Idaho), se hizo cargo de un rancho e improvisaba bertsos con los vizcaínos Urkidi y Arriola.En 1985 marchó a Reno y participó en sesiones públicas de bertsolarismo, ampliando sus actuaciones por San Francisco, Gardnerville, Bakersfield, Chino, Elko y otros condados norteamericanos.

En sus periódicas estancias en Euskal Herria Jesús Goñi ha tenido ocasión de actuar con bertsolaris como Lazkao-Txiki, Azpillaga, Egileor y Mattin y otros.En 2003 recibió el premio Heritage Award (premio al patrimonio) de folk concedido en Washington a nivel estadounidense, junto con otros bertsolaris. l

2022-05-10T06:04:02+02:00
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