El BBVA he desvelado este jueves el interés de accionistas del Banco Sabadell, "algunos bastante importantes", para que se lleve a cabo una operación de fusión entre las dos entidades, lo que les ha animado a presentar una oferta pública.
Durante una conferencia con analistas, el presidente del BBVA, Carlos Torres, y el consejero delegado, Onur Genç, han insistido en que el Banco Sabadell es más interesante ahora que hace tres años y medio, cuando hubo un primer intento fallido de fusión.
Ambos han ensalzado la mejora del banco catalán, tanto de sus resultados como de su rentabilidad y solvencia, y consideran que una integración con el BBVA daría lugar a un grupo más fuerte, una buena noticia para todos, tanto accionistas como la sociedad.
La cúpula del BBVA ha explicado que España es un país interesante para invertir por su potencial y la propuesta de comprar el Sabadell se hace porque generará más retorno para el accionista que la mera recompra de acciones.
Además, aunque respetan que el consejo de administración del Sabadell haya rechazado la oferta, creen que tienen la obligación fiduciaria de lanzar una oferta de compra a todos los accionistas del banco para que sean ellos quienes puedan decidir.
La condición para que la operación sea una realidad es que consigan al menos el apoyo de más del 50% de los accionistas del Sabadell.
A preguntas de los analistas, han dicho que el equipo del BBVA ha estado ya en contacto con accionistas del banco catalán que han trasladado su visión positiva sobre la operación.
"Hemos recibido expresiones de interés de accionistas del Sabadell, algunos bastante importantes", ha añadido Torres.
"Opinión favorable" del BCE y rechazo del Gobierno español
Por otro lado, la cúpula del BBVA ha asegurado que han estado en contacto con el Banco Central Europeo (BCE) y, aunque la aprobación de la operación es un proceso largo, la primera impresión ha sido "positiva". "No tenemos luz verde explícita, pero sí una opinión favorable", ha resumido el principal ejecutivo del BBVA.
Torres ha subrayado que la unión del BBVA y el Sabadell creará un banco que va a mejorar el apoyo a la sociedad a través del crédito, va a poder contribuir más a la economía, generará más resultados y tendrá una base fiscal mayor, es decir, aportará más impuestos.
Es bueno para el país contar con un banco con esta capacidad, ha dicho, antes de mostrarse "seguro" de que el Gobierno español va a acabar apreciando el valor de esta operación, a pesar de que el Ejecutivo apenas ha tardado unas horas en mostrar su rechazo público a la opa lanzada por el BBVA.
Así, fuentes del Ministerio de Economía han censurado "tanto en la forma como en el fondo" la operación, que creen que introduce efectos lesivos potenciales en el sistema financiero y que supondría un incremento en el nivel de concentración sectorial que podría tener impacto negativo en el empleo y en la prestación de servicios financieros.
El ministro de Economía, Carlos Cuerpo, ha añadido que "el Gobierno tiene la última palabra a la hora de autorizar" una operación a la que se opone un Ejecutivo que apuesta, ha dicho, por un sector financiero "fuerte y solvente", que piense y "tenga en mente" a sus clientes.
La fusión culminaría a mediados de 2025
Después de la oferta de compra presentada este jueves, el BBVA reunirá a sus accionistas para dar el visto bueno a la ampliación de capital con la que se llevaría a cabo el canje de acciones propuesto y preparará los respectivos informes para el BCE, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, y el regulador británico.
La clave es que tanto el BCE como la CNMV den luz verde a la OPA, lo que puede llevar un plazo de entre 6 y 8 meses. Después de eso, se lanzaría la oferta de compra a los accionistas del Sabadell, lo que se alargaría durante 70 días.
Si la operación tiene éxito, es decir, si cuenta con el respaldo de más de la mitad de los accionistas del Sabadell, los consejos de administración de los dos bancos tendrían que presentar su proyecto de fusión, lo que podría sumar otros 6 meses al calendario.
Al final, si todo discurre de forma positiva, la fusión de ambas entidades, que creará el segundo banco del Estado español y el tercero de Europa, sería una realidad a mediados de 2025.
Sinergias de 850 millones anuales
Por otro lado, el BBVA ha cifrado las sinergias de una fusión con el Sabadell en, al menos, 850 millones de euros anuales, de los que 750 millones vendrían por el ahorro de costes.
Sin embargo, la cúpula del BBVA no ha aclarado a los analistas los planes con TSB, la filial del Sabadell en Reino Unido. "Vamos a tomar las decisiones cuando llegue el momento", ha dicho Genç. Si bien, a renglón seguido, han subrayado que les gusta la franquicia del Sabadell y TSB forma parte de ella.