Los productos artesanos son el fiel reflejo del trabajo hecho con mimo para que el resultado sea de alta calidad. Durante este fin de semana, el pabellón 1 del BEC es una pequeña ciudad en la que sus calles y rincones desprenden olores y sabores artesanos con motivo de la celebración de la feria Gustoko, un evento que reúne a 240 productores artesanos de los que medio centenar son vascos. "En estos dos años duros de pandemia hemos aprendido, entre otras cosas, que la política alimentaria tiene una gran importancia en la sociedad porque para garantizar el bienestar de la sociedad es necesaria una cadena alimentaria sana y fuerte", ha explicado Bittor Oroz, viceconsejero de Agricultura, Pesca y Política Alimentaria del Gobierno vasco.
En ese propósito de lograr una cadena alimentaria fuerte y sana, los productos de kilómetro 0 tienen un papel muy importante y a lo largo de este fin de semana tienen en el BEC un inmenso escaparate. Quesos, charcutería, cervezas, espirituosos, vinos, pastelería, panadería... Casi todos los aromas, sabores y texturas tienen cabida en esta feria que presenta iniciativas bastante novedosas durante esta edición.
Una de ellas es el proyecto Kroketak.eus, una iniciativa que los alaveses Patxi Ruíz de Samaniego y Juan Gil decidieron poner en marcha hace apenas un año y que ya cuenta con su propio puesto físico de venta en Vitoria-Gasteiz. Ellos se estrenan en Gustoko y lo hacen presentando cinco de los tipos de croquetas que realizan de forma artesanal: cebolla de Zalla, jamón euskal txerri, boletus, Idiazabal ahumado y zapore berezia.
"Creemos que no hay un proyecto similar de creación de croquetas de kilómetro 0 con productos de productores cercanos. Empezamos hace un año, tenemos nuestro propio local de venta en la plaza de Abastos de Gasteiz y, poco a poco, nos vamos dando a conocer", ha explicado Patxi Ruíz de Samaniego, gerente de esta iniciativa. Ellos no son los únicos primerizos en Gustoko. Ni mucho menos. María Benages lleva seis años creando mermeladas artesanales de varios sabores. Esta mujer castellonense decidió montar su propio proyecto con tan sólo 20 años y, con mucho esfuerzo, ha logrado que su marca Magistratus haya sobrevivido a la pandemia. "Es la primera vez que estoy aquí en Gustoko y estoy contentísima porque para mí supone dar un gran paso adelante. Lo que hago son mermeladas de autora y esta feria me sirve para darme a conocer en Euskadi y establecer contactos", ha señalado María en su puesto en el que tiene, entre otros, mermelada de maíz, de fresa, de tomate... "Intento diferenciarme de los demás creando sabores propios. Ahora, tras pasar lo peor de la pandemia creo que se apuesta más por los productores artesanos", ha indicado esta joven que, además de mostrar nuevas combinaciones y sabores, busca romper con el cliché de que las mermeladas son excesivamente dulces.
Ella y otros 239 productores estarán presentes este sábado y domingo en la feria Gustoko, evento que tiene un horario de 11.00 a 21.00 horas durante este sábado y que este domingo cerrará sus puertas a las 19.00 horas en lo que es la primera feria organizada por BEC que se lleva a cabo en lo que llevamos de año.
Solidaridad con Ucrania
Por su parte, en el pabellón 2 del BEC se está celebrando la feria Outlet Bilbao, un evento en el que además de encontrar gangas y chollos, también ha habido espacio para la solidaridad con Ucrania. Allí, la asociación Ukrania Gaztea había iniciado una recogida de productos para los ucranianos que vengan a Euskadi huyendo de la guerra. Iba a durar todo el fin de semana, pero la respuesta ha sido tal que solo se recogieron productos en la mañana de ayer. "Nos hemos visto desbordados. Ha sido impresionante, en menos de tres horas hemos recogido más de cien cajas de productos", señaló Jonathan Alevicto, miembro de Ukrania Gaztea.