El bendito problema del remozado Cádiz

"Ahora tengo un problema como míster para elegir el once, acertar los cambios, que todos estén metidos. Un bendito problema”. Así valoró el técnico del Cádiz, Sergio González, los movimientos realizados por su club durante el mercado de invierno. Y es que el conjunto gaditano es el que más se ha reforzado para la segunda mitad de la temporada, con siete caras nuevas –por detrás aparecen Espanyol y Valladolid, con cinco, siendo el club catalán el de mayor gasto de LaLiga, con 8,2 millones de euros–; por otro lado ha dado de baja a seis rostros, que pueden ser siete si se tiene en cuenta la lesión de larga duración de Joseba Zaldua, que el pasado octubre sufrió una rotura de ligamento cruzado anterior.

El capítulo de altas lo conforman los defensas Raúl Parra (Mirandés) y Jorge Meré (América), los centrocampistas Youba Diarra (Salzburgo) y Gonzalo Escalante (Lazio), y los delanteros Chris Ramos (Lugo), Sergi Guardiola (Valladolid) y Roger Martí (Elche). Es decir, han reforzado todas las líneas salvo la portería.

Por otra parte, el apartado de bajas lo completan Awer Mabil (Sparta Praga), Antonio Blanco (Real Madrid), Tomás Alarcón (Zaragoza), Álvaro Giménez (Las Palmas), Juan Cala (sin equipo) y Lucas Pérez (Deportivo). Con la salvedad de este último, que dejó un millón de euros en las arcas en la única cifra que implica un ingreso para el club esta campaña, se trata de jugadores que no gozaban de la confianza del míster. De ahí que Sergio asegure que ahora tiene “un bendito problema”.

Precisamente se ha puesto especial foco en el apartado ofensivo para incorporar a jugadores, ya que la pérdida de Lucas Pérez era la marcha del máximo realizador, con cuatro goles, y entre todos los demás jugadores alineables en la primera línea de ataque suman seis dianas, un bagaje pobre para pensar en la permanencia. De hecho, actualmente el jugador con más goles es el capitán y mediocentro Álex Fernández, con tres tantos. Ahora se espera que Ramos, Guardiola y Roger mejoren los registros de un conjunto que ha anotado solo 14 goles; únicamente el Elche presenta un número inferior, con 12.

“Estamos satisfechos con lo que hemos obtenido. Creo que tenemos la capacidad de competir en la segunda vuelta la permanencia, aunque cuando vemos a los rivales no nos podemos olvidar de las plantillas y los salarios de algunos jugadores, pues nos hace recordar que esto siempre es difícil. Tenemos que demostrar desde mañana en Bilbao que tenemos una plantilla de Primera”, expresó Juanjo Lorenzo, coordinador de la dirección deportiva del Cádiz, al establecer una valoración de la actuación en el mercado invernal. “Creo que ha sido un mercado para estar muy contento como entrenador”, celebró mientras Sergio González.

El Cádiz buscará ganar en San Mamés por tercera visita consecutiva, lo que a la par significaría sumar dos victorias seguidas por primera vez esta campaña. Más allá del estímulo de estos antecedentes en Bilbao, el plantel gaditano acude con una derrota (Sevilla), dos empates (Elche y Almería) y dos victorias (Valencia y Mallorca) en la últimos cinco compromisos. “El Athletic es una de las cosas que tenemos clavadas por la primera vuelta”, admitió Sergio. Y es que así como el Cádiz se ha impuesto a domicilio en sus dos últimos viajes a La Catedral –ambas por 0-1–, los leones han vencido en sus dos últimos desplazamientos al Nuevo Mirandilla –los dos por 0-4–.

A Bilbao con cinco bajas

“Es una oportunidad para quitarnos una mala sensación y vamos con ganas de hacerlo bien”, advirtió el técnico, que cierto es que contará con las bajas por lesión del portero David Gil, el defensa Víctor Chust y los centrocampistas José Mari Martín-Bejarano y Fede San Emeterio, y por sanción de Rubén Alcaraz. Respeto al Athletic, destacó que “aprieta en campo contrario, con buenas transiciones. Es un equipo muy completo que hace muy bien las cosas”. No obstante, garantizó: “Vamos a hacerlo bien y pelear por la victoria”.