Como una reivindicación del propio sector musical. Así se ha presentado la que será principal novedad en la próxima cita con el Benidorm Fest. En la cuarta edición del certamen se conocerá a los artistas que acceden a la gran final desde cada una de las dos semifinales pero sin que se conozca la puntuación obtenida por cada aspirante.
Ana María Bordas y César Vallejo, codirectores del Festival lo justifican como una forma de ofrecer igualdad a todos los participantes al llegar a la gran final sin que se conozca el grado de preferencia por unos u otros por parte del público. “Seguro que es mucho más apasionante el llegar a la final sin saber donde está cada uno situado”, sostiene maría Eizaguirre, directora de comunicación y Participación de RTVE. Bordas apunta además que la organización está ya trabajando en la forma “de no perder intensidad ni emoción en esa parte de las votaciones”. Algo que, por otra parte, acortará la duración de las galas.
Las fechas para el 2025 ya están fijadas en los días 28 y 30 de enero para las semifinales y el 1 de febrero para la gran final de la que saldrá el representante español en el Festival de Eurovisión 2025 que se celebrará en Suiza.
“Mecha para rato”
El plazo de presentación de candidaturas ya está abierto y en la búsqueda de participantes se celebrarán campamentos de composición y se incrementará la relación con las discográficas tanto para la posible participación de artistas consolidados como la de nuevos valores.
Otra gran novedad es el fichaje de la cantante y productora Beatriz Luengo como miembro del equipo de asesores del Benidorm Fest. Quien fuera portavoz del jurado en la última edición se sumará así al cantante y compositor Rayden, el productor Pablo Cebrián y Tony Sánchez-Ohlsson, compositor de temas como Quédate conmigo, con el que Pastora Soler obtuvo un décimo puesto en Bakú.
El Benidorm Fest se ha marcado también como objetivo traspasar fronteras. Tanto como evento, para lo que iniciará una colaboración con el Festival de Viña del Mar, como para la proyección de los artistas participantes. La aspiración del certamen es que “no solo sea para elegir al representante de España en Eurovisión, sino que el Festival se ensanche”, afirma María Eizaguirre.
De ese “ir más allá” se ha puesto como ejemplo que artistas y canciones que han participado en la cita como Miss Caffeina, Almácor o Marlena van a ser banda sonora de eventos deportivos como la Vuelta a España, la Eurocopa o los próximos Juegos Olímpicos de París, respectivamente.