El Gurpea Beti Onak dejó encarrilada, el sábado, la eliminatoria de la fase final de ascenso a la Liga Guerreras Iberdrola al superar al Errece Almassora BM (23-29). Una ventaja de seis tantos que espera ampliar el sábado en el Pabellón Hermanos Induráin (17.00 horas) y, de conseguirlo, superaría el primer gran objetivo de la temporada; superar la eliminatoria en la que cayó eliminadas el año pasado.
"Estamos bien, hemos entrenado al completo y hemos hecho una buena semana. Les veo con muchas ganas y una actitud muy positiva", ha mencionado Miguel Etxeberria, entrenador del conjunto, que se mostró contentó por las sensaciones de la ida, pero sin querer celebrar antes de tiempo. En Castellón, el conjunto navarro salió con las ideas claras de inicio, moviendo el balón rápido en ataque y descolocando a un Almassora que se vio superado. "El plan sí que estuvo bien, salió y las jugadoras estuvieron muy centradas, sobre todo el inicio, fue espectacular", ha detallado Etxeberria.
Se llegó al descanso 10-16 con tramos de dominio compartido, pero sin que el resultado peligrase para un Beti Onak que supo aguantar sin apuros la siguiente media hora, para llegar al final con una renta de seis tantos. "Tuvimos opciones para llevarnos una ventaja mayor que la de seis goles, pero no estuvimos acertadas en momentos puntuales", ha especificado el técnico, añadiendo que es una faceta del juego en la que se han centrado para preparar el segundo partido. "Hemos observado esos errores que pudimos tener, para no repetirlos. También valoramos lo bueno para sacarlo mañana".
Entre los errores que señaló Etxeberria –si puede haber alguno digno de mención– ha hecho hincapié en mejorar la faceta defensiva. "Defensivamente, nos hace falta dar un paso hacia adelante y estar más seguras", ha admitido, alabando, en cambio, el trabajo realizado con la posesión de balón. "De cara a mirar arriba, el hecho de generar ocasiones lo hicimos bien y nos faltó estar un poco más tranquilas de cara a puerta para finalizar mejor".
"Espero que en este partido sepamos gestionar los nervios y dar un paso adelante en ese aspecto", ha confiado Etxeberria, seguro de que el factor campo va a jugar un papel muy importante para decidir la eliminatoria. "Jugar en tu pista, tu vestuario, poder comer en casa€ Todo ayuda. Y estar con toda tu gente, con tu familia en la grada, sí que nos dará un punto más de ganas para que el partido salga bien".
Desde el club confían en que la afición se vuelque con sus jugadoras para ser una más en busca del gran objetivo: el ascenso. Si superan esta eliminatoria, jugarían una liguilla para ascender, por primera vez en su historia, a la máxima categoría del balonmano femenino nacional. "El objetivo era hacer un mejor año que el anterior, y estamos a un paso de que lo podamos cumplir. Sería llegar a la última fase con un objetivo hecho. Ojalá podamos estar en esa final a cuatro para disfrutar y pelear hasta el último día", ha explicado Etxeberria, seguro de que sus jugadoras lo darán todo para lograr el reto.
Las entradas para el público general, alrededor de unas doscientas, se pondrán a la venta en la puerta del Pabellón Hermanos Induráin (hoy, 16.15 horas) y tendrán un precio de 5 euros. A partir de las 16.30 horas se podrá acceder a la pista. "Están todas bien, vamos con el equipo al completo", ha asegurado el entrenador.
Pese a que todo parece estar de cara, desde el Beti Onak no quieren adelantar acontecimientos y prefieren mantener la cabeza en el partido, sin contar con el resultado que se logró en Castellón. "Tenemos claro que la eliminatoria, para lo bueno y para lo malo, es de 120 minutos. Hay que salir concentradísimas a ganar el partido, independientemente de lo que haya sucedido en el partido de ida", ha afirmado.