Ha sido la temporada de cruceros más extraña en la historia de la Autoridad Portuaria de Bilbao y acaba este domingo con el atraque del último barco de placer, el Borealis.
Una clausura también extraña por tener lugar en diciembre, en años normales se cierra la temporada en octubre, pero que desde fuentes del Puerto de Bilbao valoran muy positivamente. Y eso a pesar de los pocos barcos arribados, un total de 13, pero en un contexto de pandemia que ha supuesto mejorar las cifras mucho más allá de los previsto en un principio. Y sobre todo teniendo en cuenta que el primer barco llegó el 31 de agosto a los muelles de la terminal marítima en Getxo, Olatua.
Fuentes portuarias han indicado hoy viernes como "ha sido, sin duda, una temporada atípica en la que la tendencia al alza que venía experimentando en años anteriores el tráfico de cruceros se ha visto condicionada por las restricciones adoptadas para la contención de la pandemia de la covid-19".
Aún así han considerado que "poco a poco va volviendo a normalidad y contribuyendo a la progresiva recuperación del turismo, un sector vital para la economía de muchas empresas de Bizkaia y de Euskadi".
El crucero Hanseatic Inspiration dio inicio a esta temporada txiki en la que los servicios portuarios y empresas de turismo con las que trabaja la Autoridad Portuaria de Bilbao atendieron a 13 cruceros que transportaban si sumamos el último pasaje que llegará el domingo,12.700 pasajeros. Como ocurre en anteriores años, la mayoría de estos turistas han sido británicos.
Instalaciones adaptadas
En estos meses no se ha registrado ningún brote de covid a bordo ni en las excursiones en tierra que han protagonizado los turistas. Desde la Autoridad Portuaria han indicado como "se han preparado todas sus instalaciones para garantizar la salud y la seguridad de cruceristas y personal". Por ejemplo, cada vez que los cruceristas han desembarcado en la terminal Olatua, la instalación se ha convertido en una burbuja en la que era obligatorio atender todas las normas, tales como seguir los itinerarios señalados en el suelo, estancias sanitarias, obligación de llevar mascarilla, uso de gel hidroalcohólico o mantenimiento de la distancia social.
Con la experiencia acumulada estos meses, y la participación en diferentes eventos del sector del turismo de cruceros para promocionar Bizkaia y Euskadi como destino, el Puerto encara el año próximo con optimismo. "El sector prevé un importante despegue de la actividad y un incremento del número de cruceros y escalas, siempre y cuando la evolución de la pandemia lo permita", han indicado.
Con respecto del buque que llega el domingo, con una eslora de 238 metros y una manga de 32 metros, el Borealis, fletado por la compañía Fred Olsen arribará a las 8 de la mañana con 777 cruceristas y 649 tripulantes a bordo, tras partir del puerto inglés de Liverpool y hacer escala en A Coruña.
A las 16:30 horas, tras disfrutar de una jornada en la que podrán realizar excursiones por diferentes lugares de interés de Bilbao y de Bizkaia, partirá rumbo a Liverpool, donde finalizará el crucero. Está previsto que el Borealis vuelva a realizar escala en Bilbao la próxima temporada y también en el mes de diciembre.