Nueva jornada en la Euroliga que no es una jornada cualquiera. El Buesa Arena se prepara para recibir con los brazos abiertos al técnico que más grande ha hecho a Baskonia a lo largo de sus 71 años de historia. Ya está aquí el revulsivo. El bombero al que Josean Kerejeta ha recurrido para sofocar el incendio en más de una ocasión. Dusko Ivanovic aterriza en la 'green capital' con el propósito de enderezar la nave azulgrana después de la racha de cinco partidos en apenas dos semanas que supusieron el despido de Joan Peñarroya tras año y medio de trabajo del de Terrassa en Gasteiz.
Cuarta etapa de Dusko en la capital alavesa tras las que le tocó vivir de 2000 a 2005, 2008 a 2012 y 2019 a 2021, con la consecución de tres títulos de Liga -2002, 2010 y 2020- y otros tres de Copa del Rey -2002, 2004 y 2009-. Tal currículum y tan vasta experiencia vuelven a ponerse al servicio del club de sus amores en vista de este apurado momento. El equipo se ha metido en un túnel del que necesita salir cuanto antes.
Y cuanto antes es esta noche (20.30 horas). Enfrente un Partizán que llega con un triunfo más en la clasificación y con unas temibles credenciales: Zeljko Obradovic en el banquillo, al mando de un bloque con estelares figuras como Aleksa Avramovic, Zach Leday, James Nunnally y Alen Smailagic. Han ganado en Lyon y a su más encarnizado rival, y perdido ante Maccabi, Barcelona y Olympiacos.
El montenegrino, espera, ya, a las primeras de cambio, que su roster, incluido el recién llegado Chris Chiozza, ofrezca su mejor versión. "Todos los jugadores están motivados, quieren trabajar, creer y tener paciencia para hacer un buen partido. Para ganar tenemos que jugar bien ante uno de los equipos con más talento ofensivo en Euroliga. Tenemos que jugar buena defensa y paciencia en ataque. Nos conocemos bien, tiene una ventaja grande, están muchos jugadores jugando juntos mucho tiempo, paciencia en ataque e intensidad defensiva. El año pasado tenía que haber estado en la Final Four. Tenemos que tener intensidad luchar por cada balón y tener el carácter que este equipo siempre ha tenido".
Seguro que Ivanovic tendrá aún más ganas ante este partido si cabe, ya que además fue sorprendentemente cesado de Estrella Roja la pasada temporada en vísperas de medirse al Partizán en el encendido derbi de la capital serbia. Durante el partido se llevará a cabo un acto emotivo, el de la retirada de la camiseta de otro mito del baskonismo, el argentino Luis Scola. Su número 4 ya es historia en el club.