Un verano de récord con temperaturas de más de 40 grados en Euskadi ha dejado huella en los viñedos. Un clima poco habitual al que no están acostumbradas tampoco las viñas que han tenido que enfrentarse a meses de poco agua. La uva de este año, más arrugada y con mayor deshidratación, está ya madurada y lista para ser recogida. Por esa razón, los productores de txakoli de Bizkaia han decidido adelantar la vendimia casi un mes. Algunas bodegas –las más pequeñas– ya han concluido la recogida, mientras que las grandes se afanarán las próximas dos semanas en la recogida y selección de las diferentes variedades de fruta para la elaboración del vino. Según ha explicado a DEIA el secretario técnico de la Denominación de Origen Bizkaiko Txakolina (DO), Antón Txapartegi, se espera una cosecha de uva de muy buena calidad, pero la sequía dejará un 10% menos de producción. Ahora que los productores han empezado con la vendimia, miran al cielo para controlar qué tiempo hará los próximos días. “La previsión es muy buena, ya que por lo menos hasta el jueves no da lluvia y la climatología de estos últimos días, con noches frías y días menos cálidos y soleados está facilitando una maduración óptima”, concretó Txapartegi.
La recogida de la uva se realiza manualmente en un terreno ubicado cerca de la Torre Loizaga en Galdames.
Sobre la previsión de cantidades que esperan obtener del producto, en la DO prevén un 10 % menos que en 2021 para situar las cifras a niveles del 2020, cuando se recolectaron 2.358.000 kilogramos. En el caso de algunas bodegas, esta cantidad se ha visto mermada por las quemaduras del sol del atardecer, que, según aclaran los mismo productores “no es un problema muy grande. “El txakoli de este año va a ser muy bueno, me atrevería a decir que el mejor que hemos tenido”, aclaró el responsable de la bodega Galdames, Unai Sulibarria. En este sentido, según el productor, Euskadi sigue estando en una zona fría, donde las uvas arrancan pronto y los ciclos son más largos que en otras zonas, lo que da lugar a vinos complejos y diferentes.
Tras las lluvias de los últimos días, el bodeguero comentó que, aunque siempre son bienvenidas, hubieran venido mejor a finales de julio, cuando la planta estaba más verde. Sin embargo, aunque con menos agua, la uva ha madurada rápido y antes de tiempo. Para este año esperan elaborar unos txakolis con mayor cantidad de azúcares por las altas temperaturas registradas, la maduración temprana y la bajada de la acidez”.
SUBIDA DE PRECIOS
La subida de los precios como el vidrio también ha afectado sobremanera a los bolsillos de los productores que en algunos casos no han tenido más remedio que subir el precio del txakoli para compensar los gastos. “La subida está repercutiendo en una subida de precios. Las empresas de vidrio, papel, corchos te fijan nuevos precio y son innegociables. Los coges o los dejas. No tienes margen de maniobra”, relató Sulibarria. En esta situación, según apunta el sector es “complicado trasladar al mercado estas subidas tan acusadas ya que normalmente el vino se suele subir una vez al año, a principios de la campaña de los hosteleros, que es cuando se fija el precio para el ejercicio”. No obstante, muchos productores se han resignado y admiten que “el margen es menor y que de alguna forma habrá que ajustar y compensar el déficit”.