Quieren que sea algo único y especial. Que represente su pasado de cementerio contando la historia de los dos últimos siglos de Bilbao y a la vez sea un parque urbano para todos los vecinos y visitantes. Es algo tan inédito que según ha contado esta mañana de miércoles el concejal del área de Obras, Planificación Urbana y Proyectos Estratégicos, Asier Abaunza, "no conocemos que se haya hecho algo parecido en el mundo, y no es una bilbainada".
El camposanto de Begoña se convertirá la próxima legislatura en un parque urbano para la ciudadanía que conservará parte de sus elementos originales y a la vez contará lo acontecido en la zona durante los siglos XIX y XX. Un concepto para un espacio urbano de más de 6.000 metros cuadrados de extensión, similar a la plaza creada por encima de la estación de Bilbao Intermodal, que tendrá que desarrollarse en un concurso de ideas que el Ayuntamiento abrirá la próxima semana. Unas propuestas que tendrán que recoger las condiciones municipales de amplio espectro por lo que los equipos que se postulen tendrán que integran a arquitectos, historiadores y paisajistas que "van a poder trabajar con plena libertad en sus propuestas", ha indicado Abaunza.
La idea es conseguir un punto intermedio entre las dos tradiciones de reconversión de cementerios desacralizados que imperan en Europa. En los países mediterráneos pasa por retirar cualquier vestigio que recuerde su pasado y convertir el espacio en diferentes usos urbanos, mientras que en el norte de Europa se opta por dejar todas las lapidas, panteones y capillas para colocar unos cuantos bancos de estancia y cerrar ahí su reutilización.
Cuatro líneas a mantener
Para ellos se van a valorar en las ideas que se presenten la solución arquitectónica e integración urbana en el entorno, la atención que se preste a los valores naturales, culturales e históricos del lugar, la adecuación e integración de usos y actividades diversas y otras cuestiones generales, como la gestión inteligente del espacio, así como la viabilidad y sostenibilidad económicas.
Tras la apertura del concurso la próxima semana, los postulantes tendrán dos meses para finalizar sus trabajos y presentarlos. Un jurado de especialistas con el propio edil Abaunza en la presidencia tendrá luego a partir de febrero próximo seis meses para emitir su fallo. El equipo que resulte ganador obtendrá 20.000 euro mientras que a los dos siguientes clasificados se les darán 6.000 euros respectivamente.
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Además, el Ayuntamiento podrá adjudicar la redacción del proyecto de ejecución y dirección de las obras al equipo ganador del concurso, aunque se reserva asimismo el derecho de no iniciar la tramitación del citado procedimiento. Con todos estos procesos y el posterior concurso público para acometer el proyecto ganador Asier Abaunza ha calculado que "hasta el año 2024 no comenzarán las obras en el cementerio"
Esta iniciativa se acomete después de culminar el proyecto ‘Begoñako Argia’ llevado a cabo por la Sociedad de Ciencias Aranzadi, fruto del cual se han realizado aproximadamente 4.700 exhumaciones, casi cinco veces más de lo previsto inicialmente, y que ha dado lugar, entre otros hallazgos, al descubrimiento de la mayor fosa común de la Guerra Civil desenterrada en Euskadi hasta la fecha y de una fosa común de época carlista.
- Gracias a una visita 3D se puede ver cómo estaba el cementerio antes de los trabajos de exhumación llevados a cabo en el citado proyecto ‘Begoñako Argia’