Durante todo el año, la Asociación de Antiguos Alumnos de la Deusto Bussines School ha celebrado su siglo de existencia. Lo ha hecho con distintos eventos en Madrid, Barcelona, Donostia y Londres. Pero ayer fue el gran día. El último acto del centenario de una entidad de la que forman parte 7.000 personas. Muchas de ellas, altas directivas de pequeñas empresas, grandes corporaciones y multinacionales o responsables de importantes negociados de las administraciones públicas locales, autonómicas, estatales o internacionales. Tal fue la misión. Y vaya si la ha cumplido. Bastaba pasar la mirada sobre los 600 exalumnos reunidos en la Universidad de Deusto. La flor y nata de la mixtura que llamamos economía.
A eso de las 12.45, al pie de las escalinata principal de acceso, tras la valla de la Avenida de las Universidades, el rector, José María Guibert, y el presidente de Deusto Business Alumni, Agustín Garmendia, recibieron al lehendakari, Iñigo Urkullu.
Ya en el atrio, ante la humilde mirada del eterno hermano Gárate, aguardaban el provincial de la Compañía de Jesús, Antonio España; el decano de Deusto Bussines School, Álvaro de la Rica; la directora general de Deusto Bussines Alumni, Naiara Tobalina; la presidenta de las Juntas Generales de Bizkaia, Ana Otadui; Herman Van Rompuy, presidente emérito del Consejo Europeo; el consejero de Economía del Gobierno vasco, Pedro Azpiazu; el diputado foral de Infraestructuras y Desarrollo Territorial, Imanol Pradales; el excomisario europeo de Economía y exalumno, el bilbaino Joaquín Almunia; el presidente de CaixaBank, José Ignacio Goirigolzarri, y su director territorial de la zona Norte, Juan Pedro Badiola.
Les bailó el aurresku Nagore de las Cuevas a los sones del txistu y el tamboril de Catalina Meléndez.
Una vez pasaron al impresionante paraninfo, Van Rompuy disertó sobre los retos de futuro de Europa. En su alocución, el lehendakari felicitó a la asociación por su centenario y concluyó destacando una frase de San Ignacio de Loyola: alcanza la excelencia y compartela.
Ocupaban asientos en el paraninfo, el subdelegado del Gobierno español, Vicente Reyes; la exsenadora Pilar Aresti; el director del Guggenheim, Juan Ignacio Vidarte; el presidente de Kutxabank, Gregorio Villalabeitia, y su director general, Joseba Barrena; Xabier Riezu, vicerrector del campus de Deusto en Donostia; el dean de la Bussines School, Guillermo Dorronsoro; el presidente de Consejo de Gobierno de Deusto, Francisco Javier López Ariztegui; el ilustre Jon Ortuzar, Gonzalo Meseguer, Víctor Urcelay, Vanesa Edesa, Patricia Lizarraga, Carlos Calleja, Irene Urkijo, Elena Auzmendi o Antonio Yabar.
Disfrutaron de un cóctel, del DJ, Javier Bolado, la danza de Ana Capilla, el rock&roll de William Gutiérrez y de las 30 las voces de Biotz Alai Abesbatza, con su presidente, Juan Ignacio Roscales, al frente.