Donostia – Joaquim Nadal, uno de los nuevos consellers que designó Pere Aragonès tras la salida de Junts del Govern, no le pone las cosas fáciles al president en su objetivo de avanzar a la independencia. Este miembro del Govern, que en su día perteneció a las filas del PSC, apeló ayer a recuperar el Estatut que sufrió el cepillado por parte del Tribunal Constitucional para, a su juicio, poder avanzar en la resolución del conflicto catalán. El conseller de Investigación y Universidades abogó por “retomar la plenitud del Estatut limado, modulado y cargado por la sentencia del Tribunal Constitucional” puesto que, en su opinión, puede ser un punto de partida para un autogobierno sólido que sirva para avanzar hacia la autodeterminación y la amnistía.
El fallo del TC contra el Estatut, derivado de un recurso del PP, cayó como una losa entre las fuerzas políticas y la sociedad civil de Catalunya aquel 28 de junio del 2010. La consecuencia de aquello fue un conflicto político de primera magnitud que derivó en el denominado procés. Curiosamente, la mayor parte de los preceptos declarados en todo o en parte inconstitucionales relativos al Poder Judicial se repiten, y en algunas ocasiones de modo literal, en otros articulados, como es el caso del Estatuto de Autonomía de Andalucía de 2007.
Nadal se reivindicó como “un socialista sin partido” y sostuvo que la ideología socialdemócrata está, en sus palabras, por encima de los partidos, por lo que ve coherente su trayectoria política. En este sentido, el conseller defiende que el 1-O fue “una gran movilización, pero no acabó de ser lo que la gente se esperaba que fuera porque no se materializó el objetivo de la consulta”, e instó a los independentistas a–textualmente– reconocerlo y, al Estado español, a pedir disculpas por la actuación policial. Esa, que Felipe VI loó aquel 3 de octubre de 2017.
Presupuestos
El conseller dijo estar centrado en que el Govern de Aragonès pueda ahora sacar adelante los Prespuestos, haciendo “los movimientos que hagan falta para tenerlos”, abriéndose a las fuerzas políticas que puedan ofrecer sus votos, si bien matizó que él no participa de las negociaciones. Nadal insistió en que las Cuentas catalanas llevan “el acento y la mano” del exconseller de Economía y miembro de Junts, Jaume Giró, dando a entender que es incomprensible que la fuerza posconvergente no los vaya a validar, y aseguró que el nuevo equipo los mejorará para aumentar el gasto social. En esta línea, criticó que “mucha gente en Catalunya, excepto los destroyers, creen que no conviene un proceso electoral”, y aunque se refería claramente a JxCat, evitó señalar a una marca u organización en concreto. –