Polideportivo

El corazón dividido de Sergi Vidal

El catalán analiza la eliminatoria entre los dos equipos que han marcado su trayectoria como profesional
Vidal posa con todos sus títulos. | FOTO: DNA

Hoy en día, en el mundo profesional cuesta ver, o mejor dicho, encontrar jugadores que realmente tengan sentimientos hacia un equipo que no sea de su ciudad natal. A excepción claro, de los grandes transatlánticos donde los jugadores permanecen durante varias temporadas o prácticamente toda su carrera. Por eso, en un mundo tan capitalista, el sentimiento es difícil de encontrar y Sergi Vidal quizás sea uno de los últimos grandes referentes de que el amor sí puede llegar a existir todavía en el deporte profesional.

El canterano del Joventut se convirtió en su día a la fuerza en el ídolo local del Buesa Arena. No solo por ser el jugador que más veces ha vestido la elástica azulgrana, sino también por su carácter y conexión con el público de Zurbano.

Ahora, el ya ex jugador del Baskonia, Joventut y Real Madrid, entre otros, ejerce de agente de jugadores junto a un buen amigo como Albert Miralles. El baloncesto dio sentido a su vida y lógicamente no podía separarse de su pasión. Por eso, decidió seguir ligado a este deporte desde las oficinas firmando contratos.

Eso sí, y al margen de su nueva profesión, también vive el baloncesto como un aficionado más, disfruta de los encuentros y vibra con las victorias de sus equipos, pero también sufre con sus derrotas. Sin embargo, la gran pregunta es: ¿por qué equipos y en plural? Porque Sergi Vidal tiene en su corazón a dos clubes que han marcado su intachable trayectoria de más de dos décadas. Por un lado, se encuentra el equipo de su ciudad, el Joventut, y por otro lado, el equipo donde su carrera entró en otra dimensión, el Baskonia.

En unos días, ambos van a verse las caras en los cuartos de final de la Copa del Rey, a su juicio quizá una de las más igualadas de los últimos tiempos. “Este año está siendo una ACB bonita. Está claro que la diferencia que ha habido en otras temporadas no está siendo tan grande, y esto nos hace pensar que será una Copa del Rey muy bonita. Además, si le sumamos que históricamente es el torneo de las sorpresas, se le añade ese puntito de más, que es lo que hace que sea uno de mis momentos favoritos de la temporada”, destaca Vidal.

En cuanto a la eliminatoria, el exjugador vaticina mucha igualdad. “La veo muy abierta. Creo que el Joventut está siendo un poco más irregular y el Baskonia es este año uno de esos equipos de los que se disfruta viendo jugar, es un equipo divertido. Sin embargo, es lo que digo siempre, es la Copa del Rey y a un partido nunca se sabe. Además, está el plus de que el Joventut, después de muchos años, juega este torneo en casa y seguro que la motivación será extra”.

Sergi Vidal durante su visita a Vitoria en 2019 para recibir un homenaje Josu Chavarri Erralde

Sin preferencias

Eso sí, el ahora agente confiesa que se ve incapaz de escoger entre uno de sus dos equipos del alma. “Estoy en ese punto de que lo que intento es disfrutar del baloncesto, más que posicionarme. Obviamente, en este encuentro está el club donde me formé como jugador, es decir, el equipo de mi ciudad a donde iba a ver los partidos de pequeño con mi padre. Y por otro lado, está el club más importante de mi carrera como profesional. Además, también siento que Vitoria es mi casa porque aquellos años fueron increíbles. Entonces me cuesta posicionarme y lo que quiero es sentarme y disfrutar de ese partido”.

Respecto al bache y bajón físico del Baskonia en enero, Vidal no le concede una excesiva importancia. “Sinceramente, si vas a jugar una Copa del Rey y no tienes energía, mejor ni vayas. La motivación es extra, es uno de los momentos más importantes de la temporada, donde de forma relativa es fácil ganar un título, como al mismo tiempo es sencillo irte a casa a las primeras de cambio si no estás al 100%. Creo que si en ese partido uno de los dos a nivel de intensidad está por encima del otro, realmente merecería ganar. Luego hay otros factores como la calidad, pero hay cosas que son innegociables y una de ellas es la de ir a la Copa con energía”.

Si hay jugador que conoce cómo vive el baskonismo la Copa, ese es precisamente Vidal, para quien el equipo de Joan Peñarroya “siempre tiene el plus de la afición azulgrana”. “Recuerdo tener la piel de gallina cuando llegaba el momento de salir del túnel del vestuario a la pista. Eso era un chute de adrenalina”, evoca el catalán.

En este torneo también entran en juego muchos factores que conviene controlar. El Baskonia deberá salir al Olímpico con la lección bien aprendida ya que el Joventut le ha ido tomando la medida en la Copa. “Puede ser así, sí. La última vez fue gracias a un Laprovittola excepcional, pero también una final que jugamos en Vitoria y que nos ganaron. Esa es la magia de la Copa del Rey, no importa que el rival teóricamente sea mejor. Se trata de jugar y de demostrarlo todo en un partido”, aclara.

Sergi Vidal y Albert Miralles trabajan juntos como agentes de jugadores Cedida

Consejo a la plantilla

Un jugador como Vidal, que ha disputado multitud de Copas y podido levantar varias de ellas, tiene claro cuál es el consejo que le daría a los jugadores azulgranas que se van a estrenar en este torneo. “Deben estar preparados para vivir uno de los mejores momentos como profesionales de su carrera, especialmente si son capaces de avanzar durante la Copa, porque el ambiente es brutal. Además, tienes la suerte de contar históricamente con la mejor afición. Hay que tener claro que no hay mañana y debes estar al 100%”.

Además, los aficionados azulgranas acuden esta vez a tierras badalonesas con el aliciente de que no se encontrarían ni al Real Madrid o Barcelona hasta una hipotética final. “Si quieres ganar este título, seguramente a alguno de esos dos equipos vas a tener que ganar. Pero es indiferente porque, si crees que tienes un cruce más sencillo, ya estás cometiendo el primer error de estar pensando en más allá y no en el propio partido”, precisa Vidal.

Por otro lado, y en cuanto al ambiente que se espera vivir por las calles de Badalona, Vidal sí que se moja a la hora de valorar la sede. “Cuando la Copa se celebra en ciudades grandes, toda esa afición se diluye y cuando se celebra en sitios como en Málaga, Badalona o Vitoria, el ambiente es espectacular. Es más, yo siempre me decía a mí mismo cuando jugaba que una vez me retirase, viviría con muchas ganas este torneo desde fuera, porque al final como jugador, aunque veas el ambiente, estás concentrado y no puedes disfrutarlo al 100%. Y esa fiesta que ves en las gradas y que luego se traslada a las calles es preciosa. En mi caso, además al ser de Badalona me hace mucha ilusión que se juegue aquí”, subraya.

Para terminar, Vidal no quiere mojarse con un pronóstico en cuanto a un campeón del torneo ni un posible MVP. “Es difícil, quizá te puedes ir a lo fácil y escoger a uno de los teóricos grandes que son los que lo han dominado el torneo en las últimas temporadas, pero esto es la Copa del Rey y puede suceder de todo”, augura. Lo que está claro es que nada más empezar la glamurosa cita, Vidal tendrá su corazón dividido, ya que es mitad verdinegro y mitad baskonista. En su caso, tan solo espera que gane el mejor.

16/02/2023