IMANOL García de Albéniz (8-VI-2000, Gallarta) progresa adecuadamente en las filas del Mirandés, donde permanece en calidad de cedido. El lateral izquierdo, formado en Lezama desde los nueve años, está llamado a ser el futuro de la banda que ocupan Yuri Berchiche y Mikel Balenziaga. Quizá ese destino no quede lejano, ya que este último podría abandonar el Athletic el próximo mes de junio si el club y el jugador no amplían el vínculo contractual que les une.
La dirección deportiva envió a préstamo a Imanol motivada por la referencia de un caso reciente de éxito, el de Dani Vivian. El central fue cedido la campaña anterior al conjunto burgalés, donde rindió a buen nivel para después convencer a Marcelino García Toral de su valía. Vivian gustó al técnico asturiano el pasado verano y se ganó un hueco en el primer equipo, donde, gracias al notable rendimiento, se ha convertido en la tercera opción para ocupar el eje de la zaga, relegando a Unai Nuñez. Para Imanol, Vivian es una referencia de la oportunidad de crecer fuera de Lezama.
El lateral zurdo de 1,77 de estatura y unos 63 kilos de peso está cuajando una digna actuación en el Mirandés. No en vano, tras 24 jornadas de LaLiga SmartBank ha disputado 16 partidos (1.394 minutos), todos ellos partiendo desde el once inicial, llegando incluso a firmar un gol y una asistencia; solo se ha perdido los duelos en los que ha permanecido lesionado o en periodo de reinserción tras los problemas físicos sufridos el 26 de septiembre en forma de "una lesión en el músculo aductor largo de su pierna izquierda", y que le mantuvieron de baja poco más de un mes. Es decir, es un fijo en las alineaciones del Mirandés, donde comparte vestuario –y también banda– con Iñigo Vicente, otro cedido, con viaje inverso al de Unai Rementeria, que jugará prestado en el Bilbao Athletic.
Imanol ya destacó el curso anterior a las órdenes de Joseba Etxeberria en el Bilbao Athletic. El club bilbaino, como prueba de la fe sobre su potencial, antes de tomar decisión alguna sobre su futuro, que pasaba por dar el salto al fútbol profesional, decidió ampliar su contrato hasta 2025. Luego recalaría en el Mirandés, pese a tener ofertas de otros clubes de Segunda.
El cachorro se caracteriza por su capacidad para construir, con tendencia a volcarse hacia zonas interiores para ofrecer salida de balón, y profundizar. Está dotado de frialdad, rapidez, verticalidad y cualidades técnicas que le permiten llegar a posiciones de ataque ofreciendo un buen golpeo y posibles centros.
En el Mirandés, en la faceta defensiva destacan 93 recuperaciones de balón, una media de 5,8 por partido. Ha realizado un total de 25 entradas, con un porcentaje de éxito del 48%. Su media se eleva en los duelos; en el cuerpo a cuerpo ha ganado 50 y perdido 42, mientras que en los aéreos se ha impuesto en 21 de 40. Este aspecto, el de imponerse a través del aspecto físico, es quizá su punto débil.
A nivel de creación, Imanol posee un 82% de eficacia en el pase –585 con éxito y 124 fallados–, siendo llamativo que los desplazamientos son mayoritariamente hacia adelante: 244 realizados para progresar metros y 113 son hacia atrás, con lo que se dibuja un perfil de lateral ofensivo, que busca combinar y que arriesga en las acciones con balón, ya que ha cometido 255 pérdidas y ha logrado 93 recuperaciones.
Además, lanza faltas y córneres gracias a su distinguida zurda. Su único gol en LaLiga SmartBank llegó en el triunfo frente al Amorebieta –jornada 2– con un disparo a balón parado. Imanol ha lanzado 16 saques de esquina y ha chutado en 7 ocasiones para convertir su única diana. Mientras, ha buscado 21 regates con 10 intentos exitosos.
"Este es el lugar ideal para crecer y ser algún día jugador del Athletic", expresó en su día Imanol, que busca progresar para dar el salto quién sabe si este mismo verano.