El Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco ha abierto una investigación interna para dilucidar si hubo o no fallos en la protección de la joven de 20 años, víctima de violencia de género que residía en un centro tutelado de la Diputación de Gipuzkoa, desaparecida junto a su bebé de 10 meses desde el sábado por la tarde y, en caso de que los hubiera, para depurar responsabilidades en el seno de la Ertzaintza.
En declaraciones a los medios de comunicación en el exterior del Parlamento Vasco, el consejero de Seguridad, Josu Erkoreka, ha confirmado, además, que la joven se encuentra ya fuera del Estado Español. "Se le ha hecho un seguimiento y sabemos que pasó la frontera y que apareció en Francia. Sobre dónde está ahora concretamente... no me atrevo a dar esa información tan detallada, pero está probado que está fuera del Estado".
Sobre la investigación interna, el consejero asegura que se pretende "reconstruir la secuencia completa de hechos, actuaciones, de decisiones y de comunicaciones que hayan podido sucederse a lo largo de esa jornada y conocer exactamente cuáles son los hechos". Según argumenta Erkoreka "se han publicado informaciones que apuntan a actuaciones concretas de responsables concretos de la estructura de la Ertzaintza que pueden entrañar responsabilidades" y que, añade, "evidentemente en el seno de la Ertzaintza no pueden pasar desapercibidas, hay que abrir una investigación".
Una investigación que no cuenta con ninguna hipótesis preliminar, según ha apuntado el consejero, y cuyo objetivo es analizar "qué ha pasado, cómo han actuado unos y otros y si hay que corregir, si algo si se ha hecho mal o no".