Navarra

El día grande de fiestas de Elizondo

El día del patrón Santiago atrajo a miles de personas a Elizondo, para participar en los actos programados en una jornada en la que las temperaturas bajaron bastante respecto al día anterior
El Rey Católico, Fernando, bailando el Vals Elizondo a la puerta de la iglesia parroquial de Santiago, bajo la atenta mirada de la multitud congregada las la misa.

Tras el calor del día de víspera, el día de Santiago amaneció fresco en Elizondo. A muchos jóvenes les sorprendió el día en la calle, mientras los más madrugadores se preparaban para el día del patrón, otro gran día, que además este año tocaba en festivo, por lo que mucha gente podía disfrutarlo sin ataduras. Tras las altas temperaturas del día anterior, algunos agradecían la considerable bajada del mercurio, aunque otros tuvieron que echar mano de la chaquetica, por si acaso. ¡El tiempo nunca nos pondrá de acuerdo! El cielo encapotado de la mañana amenazaba lluvia, incluso ceste luneson algunas gotas que parecían que iban a ensombrecer la gran jornada festiva que se avecinaba, pero al final se impuso el sol, eso sí, mucho más tímido que en la jornada anterior.

Este año se echó en falta la soka-dantza. El baile de hermandad, que tras muchos años sin bailarlo como se hacía antes, fue recuperado por el pueblo de Elizondo en 2016, y tras 4 años ininterrumpidos bailándolo, este lunes no tuvo lugar en la plaza. Parece que los dos años pasados sin fiestas a causa de la pandemia han hecho mella, y este año no se ha bailado.

Tras los bailes de la Plaza de los Fueros, el pueblo ofreció un lunch debajo del Ayuntamiento, que desapareció en pocos minutos, por el hambre y la sed que, por lo visto, tenía la multitud que se acercó a probar bocado o tomar un trago.

Tras el acto central del mediodía, la Comparsa siguió su camino por la calle Jaime Urrutia hasta la residencia de ancianos Francisco Joaquín Iriarte.

Mientras, la gente se dispersaba a tomar sitio en los bares de la localidad, para dar rienda suelta al vermut, antes de retirase a comer, junto a la familia, tanto en casas particulares, sociedades gastronómicas y restaurantes, que este lunes también colgaron el cartel de completo.

Las comidas familiares en muchos casos se alargaron. Algunos aprovecharon para echarse la siesta y recuperar el sueño perdido la noche anterior, otros, con la tripa llena de buenos manjares, se aventuraron a los actos vespertinos, para luego entrelazarlos con la noche, que para muchos, sobre todo para la juventud, se avecinaba larga.

26/07/2022