No es la primera piedra física, pero como si lo fuese porque la transformación de Zorrotzaurre en un distrito tecnológico está cada vez más cerca. En realidad serían dos, uno al norte y otro al sur de la isla. Dos espacios consagrados a la innovación, al emprendimiento y también a las industrias creativas.
La fecha prevista para el inicio de las primeras obras es 2023. Y ya hay empresas y firmas interesadas en que sus oficinas y laboratorios echen raíces en ambas parcelas. Una de ellas es Vicomtech. Sus responsables ya lo dijeron hace tiempo, en cuanto supieron que Bilbao contaría con este campus. Hasta que su traslado sea realidad, el Ayuntamiento ya les ha ofrecido otro local en El Ensanche.
Y, como ha dicho el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, "hay más empresas interesadas" en buscar acomodo allí. ¿Cuántas podrían ser? Imposible saberlo. El único dato, una estimación además, es que unas seis mil personas puedan trabajar en el conjunto de la isla. Y en funciones distintas y diferenciadas. ¿Cuándo? Pues otra incógnita a tenor de los vaivenes que están aniquilando cualquier proyecto.
No obstante, desde el Ayuntamiento de Bilbao, la Diputación Foral de Bizkaia y el Gobierno vasco apuntan a finales de 2024 o comienzos de 2025 para que las primeras empresas que se asienten en Zorrotzaurre empiecen a echar humo. Y según ha indicado la consejera de Desarrollo Económico Arantxa Tapia, la experiencia acumulada de otros parques tecnológicos dice que "según vamos construyendo, los espacios se van llenando".
En la denominada Punta Norte habrá centros tecnológicos, instituciones académicas y formativas, espacios para la experimentación e iniciativas vinculadas al sector cultural y creativo. Y en Punta Sur estará más centrada en lo digital y está previsto que albergue "corporaciones y startups intensivas en conocimiento".
De este modo, la isla combinaría los usos residenciales, académicos, comerciales y empresariales. "Soñamos y vamos construyendo paso a paso una isla llena de vida, que sea atractiva para vivir, estudiar, disfrutar y también para atraer nuevas empresas y proyectos de innovación a Bilbao", ha descrito Aburto.
Este distrito tecnológico y empresarial quedará camuflado entre los otros usos públicos y privados planeados para la zona. De hecho, los pabellones de Konsoni y Lancor -que serán rehabilitados para no desentonar en ese ecosistema- serán integrados en el callejero de Zorrotzaurre y en esa Punta Norte.
Su pasado industrial se abrirá ahora a otro tipo de talento y de servicios. "Se ubicarán empresas tecnológicas especializadas en el uso intensivo de nuevas tecnologías, como la Inteligencia Artificial, el Big Data, la IoT [Internet de las Cosas], así como empresas vinculadas al sector Cultural y Creativo (SCC)", ha detallado el alcalde.
En dicho espacio, y en una primera fase, la actuación se llevará a cabo sobre aproximadamente 12.000 metros cuadrados (la superficie total es de 33.000) que incluyen la recuperación y rehabilitación de esos dos pabellones. En ellos se ubicarán, además de los espacios para las empresas, la recepción y equipamientos comunes del Edificio Sede del campus tecnológico.
Esta es la zona más avanzada y la que antes podría empezar a funcionar, a generar riqueza y empleo, y a servir de imán para atraer talento internacional y de ancla para afianzar las altas capacidades de las firmas vizcainas y vascas. "Que nuestros jóvenes tengan aquí un lugar donde prepararse, trabajar y también vivir. Un modelo innovador que sea tractor", ha resumido Aburto.
El parque de Punta Sur está pensado para acoger principalmente "a las corporaciones y startups que ofrecen servicios empresariales intensivos en conocimiento y las que desarrollan su actividad dando servicios avanzados a la industria", ha detallado la consejera Tapia. Casi 100.000 metros cuadrados en total, sobre los que en una primera fase se levantará un nuevo edificio de unos 12.000 metros cuadrados.