Sin sensación de urgencia aún pero sí con las dudas generadas por las dos últimas derrotas, sobre todo la del pasado domingo en el derbi vasco, el Surne Bilbao Basket visita este miércoles al Unicaja con el objetivo de opositar a una victoria que le devuelva al buen camino. No será tarea nada sencilla ni por el rival ni por las circunstancias. El conjunto andaluz, aspirante a la Final Four de la BCL de Bilbao, ha ganado con holgura sus dos últimos duelos de la Liga Endesa y, con Ibon Navarro habiendo sustituido en el banquillo a Fotis Katsikaris, se ve aún con opciones de ascender en la tabla clasificatoria y opositar a la octava plaza a pesar de que a día de hoy solo cuenta con diez victorias, una menos que los de Álex Mumbrú.
Mientras los anfitriones recuperan a Carlos Suárez y contarán solo con la baja de Jaime Fernández dentro de una rotación larga reforzada en los últimos tiempos con Matt Mooney y Cameron Oliver, que dan mayor equilibrio y poder físico al equipo, el conjunto vizcaino no podrá contar hoy con David Walker, debilitando todavía más una posición de alero más que coja desde la marcha de Valentin Bigote. El alero estadounidense sufre un cuadro lumbar agudo acompañado de un edema óseo y no será de la partida. Además, Rafa Luz tampoco ha viajado con el equipo tras haber sido padre hoy martes, aunque se espera que ponga el mismo miércoles rumbo a Málaga para estar disponible de cara a esta cita.
Mucho deberá subir el nivel de intensidad y acierto el conjunto vizcaino con respecto al choque ante el Baskonia si quiere resultar competitivo en el Martín Carpena. El cuadro anfitrión cuenta con mucha pólvora, localizada sobre todo en posiciones exteriores (Darío Brizuela, Axel Bouteille...) y en la rotación de 'cuatros' (Tim Abromaitis, Oliver...), por lo que el rendimiento defensivo de los hombres de negro deberá recuperar el nivel de hace un par de meses.