Las Juntas Generales han pedido de forma unánime en la mañana de este lunes, a partir de una iniciativa de la procuradora de EH Bildu Ainhize Solaun, que la Diputación alavesa desarrolle un análisis del agravamiento de la situación de las mujeres víctimas de violencia de género durante el confinamiento domiciliario del pasado año.
Entre el 13 de marzo y el 2 de mayo muchas mujeres tuvieron que convivir de forma permanente con sus agresores, cuya sensación de control sobre sus parejas aumentó de forma pareja a la inseguridad y vulnerabilidad de las víctimas.
Teléfono de atención
Se redujeron las denuncias un 8% en Vitoria, pero aumentaron hasta un 60% las llamadas al teléfono de ayuda 016. Además, las tareas domésticas y el cuidado de enfermos o menores fueron a más como consecuencia del encierro, y la salud mental de muchas mujeres se vio muy resentida. Por otro lado, gran parte de las personas que estuvieron en primera línea en la lucha contra la pandemia, por ejemplo en Osakidetza, han sido mujeres.
Por ello, los grupos han reclamado a la Diputación que recoja los testimonios y experiencias de las mujeres durante el confinamiento y el efecto que la pandemia ha tenido en la desigualdad de género, tal y como ha hecho el Gobierno de Navarra.