El vicepresidente segundo del Gobierno de Navarra, José Mª Aierdi, y el presidente del Departamento francés de los Pirineos Atlánticos, Jean-Jacques Lasserre, han presentado hoy el proyecto transfronterizo ‘LaRhun-E’ que impulsan ambas comunidades, junto con los ayuntamientos de Bera, Sara, Urruña y Askain, para revitalizar, mejorar infraestructuras, generar actividad y regular u ordenar el uso del entorno del monte Larhun con la finalidad de convertir este simbólico paraje natural en un eje de desarrollo territorial sostenible a ambos lados de la frontera.
El consejero Aierdi y Lasserre han presentado hoy, durante un encuentro de ambas delegaciones que han encabezado en la localidad fronteriza de Bera, el proyecto ‘LaRhun-E’ (el acrónimo ‘E’ final responde al vocablo Elkarrekin/Ensemble/Encuentro) en el que han previsto una inversión total de 2,6 millones de euros y para el que solicitarán financiación al programa europeo de cooperación transfronteriza POCTEFA.
Foto de grupo de los representantes que han participado en la presentación.
Entre las actuaciones que tienen previsto abordar, desde una dinámica de colaboración transfronteriza, figuran la valorización del patrimonio natural y cultural, la mejora de infraestructuras sobre abastecimiento de agua, saneamiento, gestión de residuos, recursos de turismo sostenible u otros servicios, la potenciación de la movilidad sostenible en la zona o la promoción de actividad y producto local, entre otras. El proyecto estará liderado por parte de Navarra por la Dirección General de Proyectos Estratégicos y contará con la participación de la sociedad pública Nasuvinsa.
El vicepresidente y consejero de Ordenación del Territorio, Vivienda, Paisaje y Proyectos Estratégicos del Ejecutivo foral, José Mª Aierdi, ha destacado que “esta tierra, caracterizada por elementos icónicos naturales e identitarios tan potentes como el río Bidasoa o el monte Larhun, atesora una secular cultura de colaboración a ambos lados de la muga, pero es momento de convertir este capital simbólico y este espacio de oportunidades en proyectos concretos que se conviertan en palanca de desarrollo territorial sostenible para hacer de este entorno un mundo vivo y activo”.
El director general de Proyectos Estratégicos, Rubén Goñi, en el transcurso de la presentación.
“Es momento de colaboración y de ambición, de trabajar entre diferentes y al mismo tiempo hermanos a ambos lados de la muga, de poner en valor las riquezas existentes y para ello hay que comenzar con un diagnóstico de la situación en la que tenemos actualmente el entorno del monte Larhun, compartir a partir de ahí experiencias y buenas prácticas entre ambos lados y la puesta en marcha de acciones encaminadas a impulsar estrategias de desarrollo territorial sostenible y materializar un proyecto de futuro para este tierra”, ha añadido el vicepresidente Aierdi durante su intervención en el acto de presentación.
En dos fases
El proyecto, cuyo desarrollo y ejecución se desarrollará hasta finales de 2026, tiene como objetivos fijar Larhun como puerta de entrada transfronteriza y símbolo de apertura y compartición entre los distintos agentes. Además, se prevé confirmar la cima de Larhun, y su entorno, un espacio natural cercano, como espacio transfronterizo excepcional en el que destaque el modelo de transición sostenible.
A lo largo de dos fases, se desarrollarán diversos estudios para conocer las redes e infraestructuras existentes en el entorno, nuevas fórmulas para el impulso de energías sostenibles, así como el análisis de los espacios de acceso, señalética, etc.
Junto a esas acciones se procederá a realizar las inversiones necesarias para crear “el espacio de dialogo común” de este punto transfronterizo que se convertirá en “símbolo de apertura y de mediación y patrimonio”. En este aspecto se prevé la recuperación de distintos senderos del enclave natural, acciones para mantener la memoria histórica, así como los modos de vida, pastoralismo o memoria de la historia del tren que sube hasta la cima.
Este proyecto dará continuidad a la labor que comenzó en 2018 la comisión rectora que forman los impulsores de la iniciativa para “sensibilizar sobre las prácticas locales y ancestrales, la gestión ambiental y respeto de las actividades agrícolas y la biodiversidad”.