El euskera solo recibirá dos millones de euros para impulsar su presencia en el ámbito digital y de las administraciones públicas de los 1.100 millones del PERTE de la Nueva Economía de la Lengua, que tiene como objetivo convertir al castellano y a las lenguas cooficiales (euskera, catalán y gallego) en elementos tractores de la transformación digital e impulsar toda la cadena de valor de la nueva economía del conocimiento y de la inteligencia artificial.
La decisión de destinar dos millones de euros de esos más de mil la dio a conocer ayer en Bilbao la comisionada especial para la Alianza por la Nueva Economía de la Lengua, Cristina Gallach, en un acto en el que presentó a las empresas vascas del sector y a las administraciones públicas vascas las líneas generales y objetivos de este plan, que está financiado con los fondos europeos para la regeneración de la economía.
Cristina Gallach, quien estuvo acompañada en el acto por el delegado del Gobierno en el País Vasco, Denis Itxaso, explicó que los dos millones de euros del plan se distribuirán en Euskadi a través del Centro Vasco de Tecnología de la Lengua (HiTZ) de la Universidad del País Vasco para respaldar el Plan de Acción Gaitu del Gobierno Vasco, que tiene por objetivo potenciar el euskera en el ámbito digital y, en concreto, mejorar los servicios lingüísticos básicos en este idioma en Internet con el objetivo de ofrecer mejores prestaciones a la ciudadanía mediante el uso de interfaces de voz, al estilo Siri, y traducciones automáticas, entre otras aplicaciones de inteligencia artificial.
El PERTE de la Nueva Economía de la Lengua tiene como objetivo convertir a las lenguas en elementos tractores de la transformación digital e impulsar toda la cadena de valor de la nueva economía del conocimiento y de la inteligencia artificial con una inversión pública de 1.100 millones de euros, de los que al menos 30 millones se destinarán en exclusiva a apoyar proyectos de impulso del uso de las lenguas cooficiales en el ámbito digital para evitar que puedan quedar marginadas en las nuevas tecnologías digitales.
De esta manera, el euskera recibirá solo el 6,6% de lo destinado a las lenguas cooficiales y el 0,18% del montante global de los fondos europeos destinados a lo que se ha denominado la economía de la lengua pese a que, en el mismo acto, el delegado del Gobierno español, Denis Itxaso, apuntó que el PERTE “es una iniciativa de alto valor estratégico. Conjuga el empuje de sectores clave y emergentes con la transición hacia una economía digital. Se trata de garantizar de forma prioritaria que la inteligencia artificial piense en español, en euskera, en gallego y en catalán”.