El Fondo Monetario Internacional (FMI) cree que el Banco Central Europeo puede suavizar gradualmente su política monetaria hasta llevar el tipo de interés oficial al 2,5 % al final del tercer trimestre de 2025, aunque advierte de que las decisiones tendrán que tomarse "reunión a reunión".
"La prevista senda de desinflación y los riesgos equilibrados en torno a ella - basándose en información actual - implican que los tipos de interés pueden reducirse gradualmente para lograr una posición neutra - coherente con un tipo de interés oficial de entorno al 2,5 % - para final del tercer trimestre de 2025", indica el organismo en una declaración sobre la eurozona.
El FMI considera que una suavización "continuada y gradual" de la política monetaria permitiría alcanzar un "equilibrio entre mantener ancladas las expectativas de inflación y una política excesivamente restrictiva".
Sin embargo, el organismo con sede en Washington advierte de que la perspectiva de inflación podría cambiar conforme haya más inflación disponible, "cambiando a su vez el curso adecuado de la política de tipos".
"En última instancia, las decisiones sobre el tipo de interés oficial tendrán que tomarse reunión a reunión basándose en la información que vaya llegando", afirma el organismo en la declaración adoptada tras la misión de sus economistas a los países de la eurozona.
El objetivo se alcanzará en la segunda mitad de 2025
El FMI prevé que la reducción de la inflación en el área del euro registrada en 2022 y 2023 continúe "un tiempo" gracias a la política monetaria del BCE y al descenso del precio de las materias primas, de modo que proyecta que la tasa anual alcance el objetivo (fijado en el 2 %) en la segunda mitad de 2025.
El organismo señala que, si bien recientemente se ha visto un "ligero repunte" de la subida de salarios y de la inflación (en mayo subió dos décimas, hasta el 2,6 %), un amplio rango de indicadores sobre salarios e inflación subyacente apuntan a que vendrá una desaceleración conforme se modere el crecimiento de los salarios y se reduzcan los beneficios empresariales.
El BCE recortó en junio el tipo de interés de referencia en 0,25 puntos, hasta el 4,25 %, en la primera bajada desde que en julio de 2022 comenzó a endurecer su política monetaria para contener la escalada de precios desatada por el encarecimiento de la energía.
Sin embargo, el emisor de la eurozona ha advertido de que no está garantizado que la senda de recortes vaya a continuar puesto que irán decidiendo en cada reunión en función de los nuevos datos que reciban, entre otros factores, sobre la evolución de los salarios.