El Foro Social Permanente ha dado por terminado su trabajo a favor de la convivencia en Navarra y la CAV.
Tras siete años de andadura y un papel primordial en el reconocimiento de todas las víctimas, la plataforma se despide "satisfecha" del trabajo hecho, pero con la certeza de que queda mucho camino por recorrer.
A partir de ahora serán otros los instrumentos con los que se avance. Pero la fuerza seguirá naciendo “de la sociedad”, como ha reflexionado Expe Iriarte en la apertura de la jornada de despedida celebrada en el Planetario de Pamplona.
El reconocimiento de todas las víctimas, también las de la tortura; y el trabajo por una convivencia política menos histriónica; quedan como debes en un camino “que todavía es largo” y para el que apelaron a las fuerzas políticas y sindicales presentes a llegar a acuerdos, ahora que se acercan las elecciones. “Entendemos que ahora riñáis un poco”, ha lanzado Fernando Rey, conductor de la primera mesa redonda. “Pero al día siguiente queremos que os pongáis a trabajar por la defensa de los derechos humanos”.
La jornada fue de despedida y concitó a todos los que durante estos años han trabajado con el Foro. Por supuesto, la delegación navarra, encabezada por Fernando Armendáriz, Expe Iriarte o José Luis Uriz. Pero también el portavoz de la organización, Agus Hernan, y otros muchos protagonistas activos, como Paul Ríos, de Lokarri, o Anaiz Funosas, de Bake Bidea en Iparralde. Todos ellos, arropados por las principales instituciones navarras: el presidente del Parlamento, Unai Hualde, y el director general de Paz y Convivencia del Gobierno, Martín Zabalza, además de una delegación de parlamentarios de PSN, Geroa Bai, EH Bildu e I-E.
El legado en Navarra
Del poso que deja el Foro en Navarra hablaron Armendáriz e Iriarte en la primera intervención, moderada por Rey. Fue una charla distendida, donde se ha hablado de percepciones personales y de expectativas. Ambos portavoces huyeron del triunfalismo, pero coincidieron en destacar el modo de trabajo del Foro como una referencia que ha permitido estar hoy mejor que hace siete años. “Si volvemos a los 12 puntos de 2013, hoy vemos que muchos o se han cumplido o están mejor que antes”, celebró Armendáriz.
No obstante, hay debes. Queda resolver definitivamente la política de excepción penitenciaria, “donde la Audiencia Nacional sigue poniendo trabas”, lamentó el portavoz. También construir una “memoria poliédrica”, más “inclusiva”, que debe ser reflejo de “la pluralidad” que se ve en Navarra. Y también reconocer a todas las víctimas, también las que sufrieron torturas por parte de funcionarios públicos, como ha quedado acreditado en el reciente informe del Instituto Vasco de Criminología (IVAC-Krei), señaló Iriarte.
Y, más que un debe, hubo un mensaje que retumbó en la primera fila de autoridades. “Hay una necesidad de que la sociedad supere el enfrentamiento burdo, chabacano y agresivo entre opciones disntitas. Debemos aspirar a que todo el mundo pueda expresar lo que quiera de una manera cordial, y no a través del insulto. Me gustaría que se premiara lo positivo y se castigara lo negativo”, zanjó Armendáriz.
La tarde ha seguido con una mesa de observadores –participaron Véronique Dudouet y Kristian Herbolzheimer– y se cerró con un coloquio entre Funosas, Ríos y Hernan.
De Aiete al desarme
A preguntas de este periódico, Hernan ha hecho un recorrido desde Aiete hasta el desarme de ETA y casi nuestros días. Para él, es fundamental hablar “del rol de la sociedad civil”, y también de las “propuestas razonables que se pueden hacer en cada caso”. “Hay que coger la temperatura de la sociedad, de la política, de lo sindical, y a partir de hacer construir consensos”, ha explicado, para señalar a Navarra como protagonista de “un carril propio” en esta materia desde 2015 y el cambio de Gobierno.
Por su parte, Paul Ríos ha recordado los “momentos de bloqueo” posteriores a la conferencia de Aiete. Pero, sobre todo, hizo una prospección del alcance que ha tenido el diálogo con partidos políticos y el génesis de los doce puntos que se planteó el Foro Social en 2013, aunque no le corresponda a él valorarlo. En cualquier caso, fue a partir de entonces, dijo, donde en territorios como Navarra comenzaron a “construir oportunidades”.