Euskadi lidera, junto a la Comunidad de Madrid y Nafarroa, la capacidad de crear, atraer y retener talento en el Estado. Así lo refleja el Mapa del Talento 2023, elaborado por Cotec y el Ivie (Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas), presentado ayer en Valladolid. El elevado gasto en Investigación y Desarrollo (I+D), buenos sueldos y las facilidades para teletrabajar figuran entre las fortalezas para colocarse en el segundo puesto a nivel estatal. Además, la CAV es líder en la formación continua en el puesto de trabajo y cuenta con mayores oportunidades.
Asimismo, también destaca como la región con mayor peso de la población activa con educación superior, que se refleja en una mayor dotación de investigadores, profesionales y graduados STEM (cientos y tecnologías). Y la guinda es una tasa de pobreza muy reducida. Por contra, como aspectos a mejorar, el informe apunta tres: el primero, que su capacidad de retención se ve altamente afectada por unos indicadores relativos inferiores en gasto público en salud o protección social y un uso menos intensivo de energías renovables.
El segundo, que la sobrecualificación en determinados puestos de trabajo condiciona la empleabilidad. Y, por último, que Euskadi tiene una menor capacidad de atracción de inversión extranjera directa –que hace que lleguen menos trabajadores extranjeros cualificados– y de estudiantes internacionales.
El documento analiza el talento disponible en cada territorio a partir de medio centenar de indicadores y, como novedad, este año se puede comparar cada resultado autonómico con el equivalente de Alemania, uno de los principales polos de talento de Europa.
El trabajo analiza los flujos migratorios del Estado, es decir, los perfiles profesionales de los migrantes, así como los orígenes y destinos. Alemania, tercer destino favorito de los migrantes del Estado, ha sido el país elegido para comparar los resultados. El estudio muestra que el Estado español exporta mucho más perfil cualificado del que importa. En 2019, el 43% de los trabajadores estatales que emigraron lo hicieron para ocupar un puesto altamente cualificado, mientras que solo el 11,3% de los extranjeros que vinieron a trabajar al Estado ocupaban ese perfil.
Del mismo modo, solo el 39,9% de los emigrantes estatales acabaron desempeñando ocupaciones elementales o manuales, frente al 84,9% de los extranjeros que llegaron al Estado. Según diversas fuentes citadas en el estudio, más de la mitad de la masa de emigrantes que se fueron tenía estudios superiores, frente a casi la cuarta parte de los inmigrantes que llegaron.
Índice de talento
Según el Índice de Talento Cotec-IVIE, en una escala de 0 a 100, el Estado español tiene una puntuación de 49,1 frente al 67,3 de Alemania. Por comunidades, la comunidad de Madrid está a la cabeza del ranking, con 67,7 puntos, seguido de Euskadi, con 66,4 puntos, y Nafarroa, con 64,9 puntos. El análisis se basa en seis grandes pilares: facilitar, atraer, crecer, retener, capacidades y vocaciones técnicas y, por último, conocimiento. En el primero se analiza tanto el entorno del mercado como el de negocios y el mercado de trabajo. Entre los indicadores empleados, está el número de infracciones penales, el gasto en I+D, las infraestructuras TIC, la utilización de tecnología, la vulnerabilidad de las empresas y de los trabajadores, el teletrabajo o el precio de la vivienda.
El segundo pilar, mide la apertura del mercado, y aquí incluye la oportunidad de liderazgo de las mujeres o la brecha salarial. En este apartado, las tres comunidades a la cabeza superar los datos de Alemania. El tercer pilar examina el impulso educativo de las administraciones, así como los resultados que logran. El indicador incluye el gasto en educación, los resultados de PISA, el rendimiento de los sistemas universitarios, la formación en la vida laboral o la tasa de riesgo de pobreza. Y en este punto Euskadi está en el primer puesto.
En otro de los pilares se analiza la presencia de personal apto para producir en la Economía del Conocimiento. Examina la población con educación superior, el número de investigadores, la disponibilidad de científicos e ingenieros, el porcentaje de altos directivos, la exportación de alto valor añadido, el gasto en actividades innovadoras o la inversión intangible. Aquí aparecen, nuevamente, a la cabeza Madrid, CAV y Nafarroa, las tres por encima del dato de Alemania.