El gasto en protección social por habitante en la Comunidad Autónoma Vasca en 2021 alcanzó los 10.085 euros, un 3,2% más que en 2020 y un 13,1% más que en 2019. En términos absolutos, el gasto se situó en 22.084 millones de euros, 620 millones más que en 2020, según datos elaborados por Eustat.
La Cuenta de la Protección Social se elabora conforme a la metodología del Sistema Europeo de Estadísticas Integradas de Protección Social (SEEPROS) y computa el gasto y el ingreso de los sistemas de protección social realizados en Euskadi por cualquier organismo público o privado, según ha informado el Instituto Vasco de Estadística.
El gasto en protección social incluye los gastos administrativos y el gasto en prestaciones sociales. Estas últimas incluyen tanto los pagos en efectivo como las prestaciones en especie que reciben los hogares desde los sistemas de protección social.
El detalle de estas prestaciones permite analizar las funciones en las que se realiza el gasto. Descontados los gastos administrativos, el valor de las prestaciones sociales en 2021 fue de 21.815 millones de euros, un 2,9% superior al registrado en 2020, 616 millones de euros más.
Todas las funciones, excepto la de "Desempleo", aumentaron en 2021. En concreto, la que registró un mayor aumento en valores absolutos fue la de "Vejez", con 423 millones más que 2020, esto es, un 4,8% más, alcanzando los 9.266 millones en 2021.
En segundo lugar, la función "Enfermedad/Atención sanitaria", aumentó 395 millones respecto a 2020, esto es, un 7,1%, llegando a los 5.952 millones de euros. De estos, 4.790 millones correspondieron al gasto en los servicios de atención sanitaria y 1.162 millones a las prestaciones en efectivo (prestaciones por incapacidad temporal).
El resto de funciones aumentaron en importes menores. La función de "Vivienda" fue la que más creció en valores relativos, un 28,0%, 42 millones más, alcanzando los 192 millones en 2021.
A su vez, la función "Exclusión social" creció un 7,4%, lo que en valores absolutos supuso 48 millones más, registrando un gasto de 696 millones en 2021. Finalmente, la función "Familia/Hijos" creció un 6,4%, 46 millones más que en 2020, lo que supuso 761 millones en 2021.
La función "Desempleo" registró un fuerte incremento del 98,3% en 2020 consecuencia de las medidas extraordinarias adoptadas para hacer frente al impacto económico y social del covid-19, en las que se establecieron prestaciones económicas a favor de los trabajadores por cese o reducción de la actividad, por suspensión de contratos y reducción de jornada por fuerza mayor temporal (ERTEs).
La recuperación económica del 2021 hizo que el número de beneficiarios de estas prestaciones se redujera y, en consecuencia, las prestaciones en efectivo por Desempleo pasaron de 1.943 millones en 2020 a 1.469 millones en 2021, esto es un 24,4% menos. En cambio, respecto al año previo a la pandemia, 2019, el gasto en la función "Desempleo" creció en 2021 un 55,3%.
Por el contrario, el gasto destinado a prestaciones en especie (principalmente programas de formación de desempleados) aumentó en 31 millones de euros, alcanzando los 126 millones de euros. En conjunto, el gasto en esta función disminuyó en 442 millones en 2021, esto es un 21,7%.
La principal función de gasto sigue siendo la correspondiente a "Vejez", que incluye el gasto destinado a pensiones, prestaciones económicas relacionadas con la dependencia, y otras prestaciones en especie como los servicios residenciales y asistencia domiciliaria.
En 2021 supuso el 42,4% del gasto en prestaciones sociales, 0,7 puntos porcentuales más que en 2020, pero por debajo del 44,3% que representó en 2019 (año previo al covid-19).
El siguiente mayor importe de gasto corresponde a la función de "Enfermedad/Atención sanitaria" que, con 5.952 millones en 2021, supuso el 27,3% del gasto en prestaciones, aumentando su peso en 1,1 puntos porcentuales respecto a 2020.
En tercer lugar, la función "Supervivientes", con un gasto de 1.997 millones, representó el 9,2% de las prestaciones. Por su parte, la función "Desempleo" disminuye su peso, pasando del 9,6% que supuso en 2020, al 7,3% 2021.
El resto de funciones siguen manteniendo un peso relativo similar a años anteriores: "Familia e hijos" representa el 3,5%, "Exclusión social" el 3,2% y "Vivienda" el 0,9%.
SEGURIDAD SOCIAL
En relación con las unidades institucionales que realizan el gasto en protección social, el gasto realizado por el Sistema de la Seguridad Social y la Administración del Estado en 2021 supuso el 61,5% del total y creció un 1,5% respecto a 2020, 206 millones más.
Este menor crecimiento, en relación a otros años, está ligado al descenso de las prestaciones económicas vinculadas a la función "Desempleo".
El gasto realizado por las Administraciones Vascas supuso el 31,9% del total, alcanzando los 7.056 millones de euros, un 5,9% más que en 2020.
Este crecimiento corresponde, por un lado, al incremento del gasto del sistema sanitario público, que creció un 6,4% alcanzando los 4.521 millones de euros, y, por otra parte, al gasto del sistema público de servicios sociales, que incluye a las instituciones de Gobierno Vasco, Diputaciones Forales y Administraciones locales, que alcanzó un total de 2.535 millones de euros, un 4,9% más que en 2020.
Finalmente, el gasto de las Instituciones privadas, con un gasto de 1.442 millones de euros, representó el 6,5% del total y registró un incremento anual del 1,6%.
COMPARACIÓN CON EUROPA
El indicador de gasto en protección social por habitante, medido en Paridad de Poder de Compra (PPC), se situó en la Comunidad Autónoma Vasca en 9.967, lo que le sitúa por encima de la media EU-27 (9.536), de España (7.230) o Irlanda (8.173), entre otros. En el extremo alto de la tabla se encuentran Luxemburgo (16.555) y Países Bajos (12.610).
Por otro lado, el gasto en protección social como porcentaje del PIB en Euskadi se situó en el 29,9% en 2020, por debajo de la media de la EU-27 (31,7%), y al nivel de España (30,0%), pero por encima de Luxemburgo (24,2%) y Suecia (29,3%), países que, se sitúan en puestos altos en gasto por habitante.
No obstante, Eustat ha destacado que el diferencial de la Euskadi con la EU-27 del indicador gasto como porcentaje del PIB se ha reducido sustancialmente este último año, ya que mientras en 2019 la diferencia era de 3,4 puntos porcentuales (en la EU-27 el gasto era 28,0% del PIB, frente al 24,6% en Euskadi. En 2020 la diferencia fue solo de 1,8 puntos porcentuales: la media de UE-27 fue del 31,7% y la de la Euskadi del 29,9%.