Desde que fue proclamado como candidato del PNV a lehendakari, Imanol Pradales ha defendido una política con sensibilidad para proyectar que tiene el termómetro puesto en la sociedad y sus problemas, con el objetivo de desactivar esas lecturas que ven a los jeltzales encerrados en una torre de marfil, distantes o acomodados en la inercia, y que creen que han perdido por ello a parte de su electorado. Y este martes en Ajuria Enea, ya como lehendakari y en el primer acto oficial de los quince consejeros y consejeras que componen su Gobierno, Pradales volvió a pedir a los integrantes de su gabinete que piensen “en los ojos” de la ciudadanía y tomen decisiones “valientes” y “arriesgadas” sin miedo a equivocarse, si ven la oportunidad de mejorar la vida de la gente. Que haya ambición. Tras esa introducción y tras la toma de posesión del cargo de los diez representantes por parte del PNV y los cinco del PSE, los consejeros protagonizaron unas intervenciones que en muchos casos fueron muy extensas y específicas en cuanto a las medidas que se quieren implementar, en lugar de despachar esta especie de primer día de clase con declaraciones más genéricas. El denominador común fue la apuesta por dar nuevos impulsos o saltos en la gestión, y también la defensa de los acuerdos.
Así sucedió, por ejemplo, con el consejero de Salud, Alberto Martínez, quizás el representante que concentra las mayores expectativas y sobre el que pesa la mayor presión social para que reduzca las listas de espera y reconduzca la ebullición en Osakidetza. Él, que además dejó una frase para la hemeroteca (“tengo muchas carencias, y una de ellas es que no hablo euskera”), refrescó la apuesta de Pradales por convocar “un gran pacto vasco” sobre el sistema de salud, con universidades, colegios profesionales, sindicatos, partidos políticos y expertos y como un marco de colaboración permanente. Es una convocatoria que no será inminente, aunque su alusión a los próximos días dejó esa sensación en los medios de comunicación. Martínez no es un político, sino que procede del sector profesional y ha sido hasta la fecha jefe de anestesistas en Cruces. Desde ese conocimiento, reiteró también algunos de los compromisos anunciados por Pradales en campaña para solucionar los principales focos de desgaste, como que la ciudadanía pueda ser atendida en el ambulatorio en 24 horas o en 48 como máximo. Del mismo modo recurrió a la concreción Nerea Melgosa, que volverá a encargarse de las políticas sociales con el objetivo de extender las ayudas a las familias con hijos hasta los 7 años y 10 en casos de familias numerosas y monoparentales.
La industria y el fondo soberano
En Industria, Mikel Jauregi aspira a que Euskadi “lidere el renacer industrial europeo”, y en cierto modo va a formar equipo en esta tarea con el consejero de Hacienda y Finanzas, Noël d’Anjou, quien diseñará nuevos fondos, como el fondo soberano, para impulsar inversiones y atraer proyectos de futuro. El programa de PNV y PSE recoge, además de las aportaciones al fondo Finkatuz para el arraigo de las empresas, una reforma de las EPSV, con la idea de que esta bolsa de dinero que se utiliza para complementar la pensión pública aporte un porcentaje al fondo soberano vasco para la industria.
Los fondos europeos
Por la parte socialista, el vicelehendakari segundo, Mikel Torres, fue concreto incluso con cuestiones de agenda. Recién incorporado desde la alcaldía de Portugalete y tras una vida ligada al mundo municipal, Torres sorprendió anunciando una próxima reunión con la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, para que los fondos europeos lleguen a Euskadi con “mayor rapidez”. Esta coletilla puede llamar la atención, en la medida en que ha sido el PNV quien ha denunciado las trabas burocráticas para acceder a ese dinero, mientras que el PSE se centraba hasta la fecha en poner en valor el dinero liberado por el presidente español, su líder Pedro Sánchez.
¿Supone este anuncio un salto también desde el PSE? Las fuentes socialistas consultadas por este periódico aclaran que siguen reivindicando el dinero que ha llegado al nivel del Gobierno vasco y a otras instituciones, así como su grado de ejecución, y localizan el problema en los canales para que llegue al nivel empresarial. ¿Se refieren a la burocracia? Si es ese u otro problema es lo que tendrá que abordarse con Montero desde el PSE, el nuevo gestor de los fondos, que en este estertor final del reparto ya no serán gestionados por el PNV. Torres, por otro lado, anunció una convocatoria de los agentes sociales para mantener vivos los canales de comunicación, una práctica que ya era habitual en su predecesora Idoia Mendia y que Torres, con un perfil conciliador, también aspira a mantener. Quiere acordar con ellos la Ley de Participación Institucional.
De saltos en calidad habló también el nuevo consejero de Ciencia, Universidades e Innovación, Juan Ignacio Pérez, quien de manera muy gráfica recurrió a Newton para proponerse llegar muy lejos apoyándose en los hombros de los “gigantes” que lo han precedido. La portavoz y consejera de Autogobierno, María Ubarretxena, apostó por crecer en ese sentido y también por una administración más digital y cercana; la vicelehendakari primera y responsable de Cultura y Política Lingüística, Ibone Bengoetxea, se propuso hacer diplomacia cultural para dar a conocer lo vasco; y Bingen Zupiria, el nuevo responsable de Seguridad, afronta el reto de desatar los nudos de la conflictividad en la Ertzaintza, un asunto que reconoce que está en el debate.
El socialista Denis Itxaso, al frente de Vivienda, no prometió milagros, pero sí “una actitud de combate” para garantizar el acceso a la vivienda buscando hasta debajo de las piedras y movilizando también lonjas comerciales si se da el caso, para quien lo desee. El transcurso de la legislatura mostrará si PNV y PSE consiguen llevar adelante su convivencia en este terreno sin tensiones relevantes, pese al rechazo del PNV a la ley estatal.
En clave de mejora hablaron también Susana García desde Movilidad Sostenible, Javier Hurtado desde Turismo, o María Jesús San José desde Justicia y Derechos Humanos. Y el nuevo Gobierno defendió los acuerdos amplios, como lo hicieron desde Educación Begoña Pedrosa, o la consejera de Alimentación, Desarrollo Rural y Pesca, una nueva cartera que llega tras las tractoradas y donde Amaia Barredo promete diálogo con el sector.
Responder a las expectativas
Tras la presentación, se celebró el primer Consejo de Gobierno. El nuevo Ejecutivo tiene ante sí el reto de echar a andar con varios independientes y personas procedentes de su sector, que no son políticos profesionales, y que tendrán su tiempo de rodaje. El próximo julio es un mes hábil a los efectos del Consejo de Gobierno, que tendrá que gestionar las expectativas en un contexto marcado por el empate a 27 escaños entre el PNV y Bildu. Es un Gobierno con mayoría absoluta, la que suman PNV y PSE, aunque Pradales apostó por gobernar para todos.