Las reacciones políticas al preacuerdo alcanzado el viernes entre los sindicatos UGT y CCOO y la patronal CEOE continuaron ayer, y volvieron a dejar patente la buena acogida que ha tenido la propuesta de subida salarial acordada entre los agentes sociales en el seno del Gobierno español. En opinión de la ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, se trata de “un acuerdo de avance de nuestro país en paz social”.
En concreto, Rodríguez señaló: “Estamos de felicitación en esta jornada porque vemos cómo ha sido posible un nuevo acuerdo entre la patronal y los sindicatos. Están ultimándolo, pero significa un acuerdo de avance de nuestro país en paz social que también redunda en la paz de los distintos municipios y ciudades de nuestro país”.
Por su parte, la ministra de Hacienda y vicesecretaria del PSOE, María Jesús Montero, celebró el “preacuerdo” alcanzado el viernes para llegar a tener un “pacto de renta” que mantenga el poder adquisitivo. “Ese es el camino, porque la sociedad se construye colectivamente y seríamos ilusos, soberbios, si pensáramos que las cuestiones sólo se deben a la tarea de un Ejecutivo”, apuntó, creyendo que “la grandeza del político” está en contar con la “capacidad de conseguir de cada uno de los actores que están en la sociedad”.
Así, dio un “infinito” agradecimiento a Comisiones Obreras, a la patronal y “sobre todo a UGT, nuestro sindicato hermano”, porque “de la mano del diálogo social se han firmado mas de diecisiete acuerdos y se han conseguido revertir gran parte de las políticas de recorte”. “Han sido ellos, con el gobierno, pero como protagonistas, lo que han logrado la reforma del mercado, las prestaciones de autónomos, la subida del salario mínimo, el sustento de los ERTE, los nuevos regímenes y todo aquello que está permitiendo engrandecer a la clase trabajadora”, indicó.
“Paz social”
El mismo viernes, tanto la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, como el presidente Pedro Sánchez celebraron el “avance” en el acuerdo entre patronal y sindicatos para subir los salarios. El también secretario general del PSOE sacó pecho de que en el Estado español hay más paz social que en la mayoría de países de la Unión Europea. Una circunstancia que se produce porque su Gobierno “recuperó el dialogo social que otros tiraron a la basura”, afirmó en referencia al anterior Gobierno del PP.
“Y gracias a esa reforma laboral que aprobamos con los agentes sociales y al compromiso de los trabajadores y de los empresarios, hoy podemos decir que estamos viviendo una legislatura de reformas, de paz social y de avances”, añadió. De este modo, el jefe del Ejecutivo hacía referencia al acuerdo que ultiman este fin de semana CCOO, UGT, CEOE y Cepyme para recomendar subidas salariales del entorno al 4% este año y del 3% tanto para 2024 como para 2025, con una cláusula de garantía salarial que se activaría en función de la evolución de la inflación y que podría implicar un incremento adicional de hasta el 1%.
El acuerdo definitivo para el que sería el V Acuerdo Interconfederal para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC) todavía no está cerrado, por lo que estas cifras podrían sufrir algunas modificaciones, según señalaron ayer fuentes de la negociación.
Sánchez subrayó también que cada mes hay un buen dato de empleo lo que supone “una mala noticia para la derecha”, según expresó. Así, remarcó que en plena guerra de Ucrania y tras una pandemia, el Estado está en unos niveles nunca vistos en la serie histórica y destacó que se haya producido con un gobierno socialista en Moncloa.
Euskadi
“Había que llegar a un acuerdo”
Diferentes visiones. En Euskadi también hubo reacciones ayer. El parlamentario y presidente del PNV de Araba, José Antonio Suso, saludó el acuerdo. “Era necesario, había que llegar a un acuerdo de rentas o un acuerdo de subida de salarios debido a la elevada inflación”, señaló. Y destacó que en Euskadi existe “un modelo sindical distinto” que seguirá negociando “para que esos acuerdos a los que se ha llegado en Madrid sean mejorados aquí en la negociación colectiva”. Sin embargo, el parlamentario de EH Bildu Mikel Otero advirtió de que se trata de “un preacuerdo” y con “resultados que no son de obligado cumplimiento”. Desde su punto de vista, el principio de acuerdo “se queda escaso e insuficiente”.