El Ministerio de Interior creará una Oficina Nacional Contra las Violencias Sexuales y un registro de seguimiento y prevención de los delitos sexuales (Sistema VioSex) de similares características al sistema Viogen para el seguimiento de casos de violencia machista. Estas dos medidas se enmarcarán entro del Plan Estratégico contras las violencia sexuales, el primero de estas características en la Unión Europea, que está dotado con un presupuesto de 1.490.000 euros.
El registro Viosex es una herramienta informática que favorecerá la prevención basada en inteligencia y análisis del fenómeno de las violencias sexuales y la integración de información que resulte de utilidad para los objetivos de este Plan Estratégico. A imagen del Sistema VioGén, VioSex integrará funcionalidades que permitan conectar las bases de datos policiales y favorezcan la interacción bidireccional entre las instituciones integradas en el sistema, en especial los servicios penitenciarios.
Ante una agresión sexual de cualquier tipo, los motores de búsqueda de VioSex permitirán localizar hechos similares sucedidos en otros entornos geográficos o con similares modus operandi que puedan facilitar su esclarecimiento.
La Oficina Nacional Contra las Violencias Sexuales asumirá asimismo el desarrollo de actividades de investigación científica sobre delitos sexuales en colaboración con universidades, organismos y entidades de producción científica, así como la elaboración de informes técnicos y estadísticos sobre diferentes aspectos de la violencia sexual.
La Oficina Nacional Contra las Violencias Sexuales creará un grupo de trabajo de profesionales especializados de las Fuerzas de Seguridad, las policías autonómicas y las locales que analice la problemática de los delitos sexuales en cada ámbito y la cooperación en la investigación policial mediante procedimientos, aprendizajes y buenas prácticas de uso común en la mejora de la atención a las víctimas de los delitos sexuales.
Para la elaboración del plan, expertos de la Secretaría de Estado de Seguridad han tenido en cuenta los diferentes fenómenos relacionados con las violencias sexuales, las víctimas y los victimarios de cualquier edad y sexo, conforme a las definiciones aportadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS), ONU-Mujeres y otras organizaciones internacionales, así como la legislación española vigente en esa materia.
El plan estratégico se articula en torno a seis grandes ejes que engloban en total 59 medidas concretas con las que se pretende dar respuesta a los distintos frentes y retos que presenta el fenómeno de la violencia sexual en España. El plan potenciará los planes de formación interdisciplinar de los miembros de las Fuerzas y de Seguridad y de los profesionales de Instituciones Penitenciarias, en especial en todo lo relacionado con la atención a las víctimas.
Asumirá la revisión periódica y potenciación de los planes de formación de los miembros de las Fuerzas de Seguridad y otros profesionales en la lucha contra todas las formas de violencia sexual, así como la mejora de la atención de las víctimas.
Para alcanzar ese objetivo, esta oficina diseñará programas de formación específica y especializadas para los efectivos policiales en función de los tipos de delitos y las edades o necesidades especiales de las víctimas, así como las nuevas realidades como la ciberviolencia sexual.
Otro de los objetivo pasa por generar y actualizar conocimiento con el desarrollo de actividades de investigación científica sobre delitos sexuales en colaboración con universidades, organismos y entidades de producción científica, así como la elaboración de informes técnicos y estadísticos sobre diferentes aspectos de la violencia sexual.
A corto plazo, se actualizará los convenios firmados por el ministerio con universidades u otras entidades públicas o privadas con interés legítimo en la investigación científica sobre la violencia sexual para favorecer el desarrollo de las actividades investigadoras colaborativas de diversos campos, entre ellos la elaboración de programas con perspectiva de género de tratamiento para agresores sexuales en el ámbito penitenciario y medidas alternativas a la prisión.
En cuanto al apoyo a las víctimas y mitigación del daño, Interior quiere promover los servicios de apoyo y asistencia centrados en las víctimas de los delitos sexuales.
Para ello, estimulará programas conjuntos de formación y sensibilización para operadores de diversas disciplinas (medicina, psicología, derecho, trabajo social, seguridad) involucrados en la atención de víctimas de delitos sexuales, en especial en lo relacionado con su tratamiento integral mediante programas destinados a grupos de población específicos.
También incluirá los protocolos necesarios para encauzar su estrecha relación con otros centros del Ministerio del Interior, como el Servicio Central de Violencia de Género, la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO) o la Dirección General de Relaciones Internacionales y Extranjería, entre otros.
La Oficina Nacional Contra las Violencias Sexuales creará estructuras de cooperación multilaterales con otras instituciones y entidades relevantes en materia de violencia sexual sobre la base de un enfoque de género y para la prestación de servicios de apoyo y protección a las víctimas de la violencia sexual.