Pedro Sánchez no tiene intención de presentar un proyecto presupuestario consciente de que no dispone de los respaldos necesarios en la Cámara baja para sacarlo adelante, lo cual supondrá que haya aprobado solo tres Cuentas públicas en siete años. Moncloa entiende que dar el paso supondría “hacer perder el tiempo al Congreso y, por lo tanto, a los ciudadanos”. Es el mensaje que deslizan los ministros del ala socialista del Ejecutivo español mientras desde Sumar siguen presionando al respecto porque, por encima de todo, entienden que “discutir cuestiones en el hemiciclo con los grupos parlamentarios “ siempre es bienvenido. La portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, consideró este martes importante presentar el proyecto “de manera acordada” y, como no hay esa entente, Sánchez prefiere tirar de un “ejercicio de realismo”. El ministro de Presidencia, Félix Bolaños, recordó que la Constitución también regula “con total normalidad” qué sucede cuando no hay unos Presupuestos Generales del Estado (PGE) y se refugió en que ya en otras ocasiones se han prorrogado sin ningún problema, así como en muchas comunidades. Sin embargo, el PP le recordó el “mandato constitucional” de llevarlos a las Cortes españolas y no descarta recurrir a la Justicia en caso de que no se haga así.
“ Sudaremos la camiseta para acordar las Cuentas pero la realidad del Congreso es la que es ”
Pilar Alegría - Ministra portavoz del Gobierno
Los ministros socialistas hicieron hincapié en que las últimas Cuentas se diseñaron por el actual Gobierno “progresista, son expansivos y están funcionando extraordinariamente bien para nuestra economía y para nuestra sociedad”. Alegría insistió en que seguirán “sudando la camiseta” porque nunca dan “por perdido ningún partido, pero la realidad del Congreso es la que es”. Cuestionada por si se dan un plazo para cerrar los acuerdos que permitan aprobar el proyecto, se limitó a indicar que lo que les gustaría es que fuera “lo antes posible”. “Entenderán y comprenderán que si solamente dependiese del Gobierno tener acordadas estas Cuentas, pues le podría trasladar una fecha más concreta o más firme”, matizó. En paralelo, desde el partido de Yolanda Díaz, creen que “la preocupación es máxima porque sin Presupuestos Generales del Estado no se pueden hacer políticas públicas”. Según la portavoz de los comunes, Aina Vidal, no descartan que la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo convenza a Sánchez de presentarlos aun sin tener un acuerdo previo que le garantice su aprobación. “Nosotras formamos parte de este Gobierno y por lo tanto es en este caso dentro del mismo donde vamos a seguir negociando y hablando con el Partido Socialista para que traiga los Presupuestos y para que podamos al menos discutirlos”, destacó.
“ Discutir cuestiones en el ámbito del hemiciclo con los grupos nunca es una pérdida de tiempo ”
Verónica Martínez Barbero - Portavoz de Sumar en el Congreso
Frente al convencimiento de los socialistas de que perder la votación debilitaría la imagen del Ejecutivo, en Sumar creen que “lo importante es que la sociedad vea que tenemos un proyecto de gobierno”, explicó en los pasillos el diputado y ex secretario de Estado Enrique Santiago (IU). Ahora bien, también hay sectores en este espectro, caso de Compromís, que abogan por la prórroga si se priorizan las ayudas a Valencia por la dana -el Instituto Valenciano de Finanzas ha estimado en 17.000 millones la necesidad de inversiones para paliar servicios e infraestructuras dañadas por el temporal-. “Más allá que haya nuevos Presupuestos o no, lo que exigimos al Gobierno es que “invierta todo el dinero que tenga que invertir en la reconstrucción de las zonas afectadas”. “Y esto se puede hacer con o sin presupuestos”, zanjó la portavoz águeda Micó.
Por su parte, desde Podemos, su portavoz, Javier Sánchez, acusó al Ejecutivo de haber “renunciado a presentar los Presupuestos, no por falta de apoyos, sino porque prefiere aumentar el gasto militar de tapadillo”. También exigió que una decisión tan relevante debe pasar por una votación en el Congreso y que el Ejecutivo tiene dos opciones: atreverse a traer nuevas Cuentas públicas con una subida del presupuesto en defensa y convencer a sus aliados o al PP; o sencillamente desechar un incremento del gasto en defensa si opta por la prórroga presupuestaria, dado que los PGE de 2023 no se pensaron para esto. Por ello, demandó a Sánchez que se deje de “ambigüedades” y “medias verdades”
Nuevas elecciones
Entre tanto, PP y Vox ahondaron en que la “renuncia” del Gobierno supone “la mayor demostración de su falta de proyecto político para el país”. Desde Génova trasladan que la Constitución “obliga a presentarlos”, no a aprobarlos, y que Sánchez incurriría en dejación de funciones si ni siquiera los presenta. El portavoz parlamentario del PP, Miguel Tellado, defendió la convocatoria de un debate sobre el estado de la nación, ya que “no se celebra desde el año 2022, y no es de recibo”, herramienta con la que el partido de Alberto Núñez Feijóo percibe que Sánchez quedaría “retratado”. Es más, el dirigente del PP apostilló que si el dirigente socialista no consigue el apoyo del Congreso “para lo más básico”, como son unos Presupuestos, “ya sabe qué es lo que tiene que hacer: lo mismo que le recomendaba al presidente Mariano Rajoy en el año 2018”. Así aludió a las declaraciones del líder del PSOE, entonces jefe de la oposición, pidiendo a Rajoy la convocatoria de elecciones si no tenía Cuentas. La portavoz de Vox en el Congreso, Pepa Millán, se mostró incluso convencida de que, “aunque pudiera traer los Presupuestos a la Cámara, Sánchez no tiene proyecto más allá de mantener su sillón”. Lo que sin duda, de momento, no tiene es ganas de que los socios de investidura retraten su debilidad.