El Gobierno español defiende a capa y espada su gestión en la elaboración de la Ley de Amnistía, una norma que está generando incesantes críticas –incluso con manifestaciones en las calles de por medio– por parte del PP. Más concretamente, los miembros del Ejecutivo de Pedro Sánchez tuvieron que volver ayer miércoles a hacer frente a los dardos lanzados desde la bancada popular, una acusaciones intensificados si cabe tras conocerse las últimas modificaciones pactadas junto a Junts y ERC –inclusión del terrorismo siempre que no hay “intención directa” de vulnerar derechos humanos, lo que permitiría la vuelta del expresident Carles Puigdemont–. Los socialistas lograron esquivar la presión de la oposición gracias a los votos de sus socios de gobierno, no obstante, el de la amnistía será un asunto cuyo debate será largo.
Tanto es así que el ministro de Justicia, Félix Bolaños, tuvo que salir al paso de las críticas. Bolaños, uno de los pilares del Ejecutivo español para el presidente Sánchez, negó que el supuesto terrorismo del procés sea comparable con el de ETA, mientras que el PP no levantó el pie del acelerador al Ejecutivo de Pedro Sánchez de ser “cómplice de los terroristas”. “Seamos serios, ¿de verdad alguien cree que es comparable el proceso independentista con el terrorismo que sufrió España durante décadas? Lo que todos entendemos por terrorismo, lo que España sufrió durante décadas de terrorismo, eso está fuera de la amnistía“, afirmó Bolaños, quien insistió además en que la ley que salió este pasado martes de la Comisión de Justicia con los cambios pactados por el PSOE con Junts, ERC y el resto de sus socios parlamentarios es “todavía más sólida”, y aún cuenta con una mayor seguridad jurídica.
En esa misma línea, la vicepresidenta primera, María Jesús Montero, abundó en que la voluntad del legislador es la de que queden excluido de ser “amnistiables” delitos de terrorismo que supongan una violación muy grave de los derechos humanos, mientras que el ministro de Transportes, Óscar Puente, apoyó las enmiendas pactadas con los independentistas catalanes como “cautelas” ante “algunas cosas que están sucediendo”. “Hay quien quiere hacer un traje a medida en un sentido y otros tratan de evitarlo, esa es la situación”, afirmó Puente.
Catarata de críticas del PP
Los últimos acontecimientos en cuanto a la amnistía, cuyas enmiendas volverán a ser votadas en el Pleno del Congreso previsiblemente el día 30 de enero, sigue enfureciendo a los responsables del PP. Su diputada Cayetana Álvarez de Toledo acusó directamente al Gobierno de Sánchez de ser “cómplice de los sediciosos y “desde ayer cómplice de los terroristas”. “Desde ayer hay dos tipos de terrorismo, el que viola los derechos humanos y el que te garantiza siete votos para seguir en la Moncloa”, lamentó. Los barones del PP tampoco ahorraron críticas. De hecho, Juanma Moreno calificó de “bochornoso” que el Gobierno sea “humillado todos los días” por los partidos independentistas; mientras que el presidente murciano Fernando López Miras agregó que ”los terroristas no son delincuentes”, sino “socios de Gobierno” de Sánchez.
Fuego amigo para Sánchez
Page, un verso suelto en el PSOE
“En el extrarradio”. El presidente socialista de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, y el ministro Óscar Puente mantuvieron ayer un intercambio de declaraciones con la amnistía como telón de fondo. Page, que arrancó el cruce dialéctico, afirmó que el PSOE se sitúa “en el extrarradio de la Constitución” con sus acuerdos con Junts. Puente le replicó que es él el que se sitúa “en el extrarradio del PSOE” desde hace tiempo. Page contraatacó afirmando que “el que gana a la derecha y la extrema derecha en este país no está en ningún extrarradio” y recordó que su formación es “un partido troncal en la Constitución”. La Carta Magna “ha sido viable por el PSOE”, concluyó.
Las valoraciones
Defensa
Gobierno español. Varios ministros de Sánchez tuvieron que salir al paso de las reacciones del PP en cuanto Ley de Amnistía. Entre ellos destacó el ministro de Justicia, Félix Bolaños, quien se cuestionó si “alguien piensa que es comparable el ‘procés’ con el terrorismo sufrido durante décadas”.
Ataque
Por parte del PP. Los miembros del PP siguen tratando de azuzar el fuego de la controversia. Su diputada Cayetana Álvarez de Toledo acusó al Gobierno español de ser “cómplice de los sediciosos” y desde anteayer “cómplice de los terroristas”. Además, barones regionales como Juanma Moreno –Andalucía– y Fernando López Miras –Murcia– salieron ayer a lamentar el “bochorno” que está escenificando el Ejecutivo de Pedro Sánchez.
Neutralidad
Fiscal general. Por su parte, el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, quiso calmar las revueltas aguas que genera esta cuestión al reivindicar ayer que la institución que encabeza actuará con “objetividad” y “neutralidad”. No ejercerán de “comentarista de la actualidad política”, aseveró, a la par que advirtió de que quien busque “su mera proyección personalista” en el asunto de la amnistía no tendrá cabida en su proyecto.