El Gobierno trabajará para que el 25% de la tierra agrícola sea ecológica en 2030

El Gobierno de Navarra ha dado luz verde al decreto foral por el que se regula la producción agraria ecológica, cuyo objetivo es actualizar el anterior de 1999 y adecuar el sistema de producción, los instrumentos de control, coordinación y verificación a la nueva normativa europea. El departamento de Desarrollo Rural se ha propuesto trabajar para conseguir que el 25% de la tierra agrícola se convierta en ecológica para 2030, como marca la estrategia De la granja a la mesa.

Este decreto foral “promueve un crecimiento sostenido de este sector en Navarra para convertirse en un referente estatal y europeo en el crecimiento de la agricultura y ganadería ecológica, con un modelo de desarrollo rural que atienda las demandas, necesidades y retos ambientales del siglo XXI”, ha destacado la consejera de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, Itziar Gómez.

La Comunidad Foral suma actualmente 66.201 hectáreas, que suponen más del 7% del total, por lo que queda camino por recorrer para llegar al objetivo del 25%.

Qué regula

La normativa regula en el ámbito competencial y geográfico de Navarra la producción, la preparación, el almacenado, la distribución y la comercialización de los productos ecológicos, así como los instrumentos de coordinación, control y verificación del cumplimiento de las especificaciones normativas que afecten a la producción ecológica, para adecuarlos a nueva normativa europea vigente en la materia.

Ahora el documento debe pasar por el Consejo de Navarra para su revisión. De esta forma, si no existe ningún inconveniente, el departamento prevé que el decreto foral esté aprobado a finales de este año.

Creación de una comisión

La consejera del ramo, Itziar Gómez, ha avanzado que una de las novedades consiste en la constitución de una comisión de coordinación de la producción ecológica en Navarra, integrada por el departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, la sociedad pública INTIA, CPAEN, las organizaciones agrarias, la Asociación de Industrias Agroalimentarias, las asociaciones de consumidores y la entidad de control y certificación.

Esta entidad involucrará a distintos agentes con peso en el sector para garantizar la estrategia, en pleno proceso de elaboración del plan, de la producción ecológica y acercar a Navarra a los hitos marcados por Bruselas.

El CPAEN

Otras modificaciones están relacionadas con la definición de las funciones del Consejo Regulador de la Producción Ecológica (CPANE/NNPEK) en la Comunidad Foral e identificación en base al marco jurídico comunitario en el que se circunscribe el modelo de producción ecológica, sistemas de control y certificación y condicionar los apoyos con recursos públicos.

Además, define las funciones de la autoridad competente y redefine los procedimientos de certificación y las obligaciones de los operadores.

‘De la granja a la mesa’

El decreto foral tiene en cuenta la estrategia De la granja a la mesa, un sistema alimentario justo, saludable y respetuoso con el medio ambiente, que establece acciones para garantizar una producción alimentaria sostenible. En lo relativo a la agricultura ecológica, como acción para garantizar una producción sostenible, Europa se marca el objetivo de que al menos el 25% de las tierras agrícolas de la UE se utilicen en agricultura ecológica en ocho años.

El Gobierno navarro pretende alcanzar este porcentaje, según Gómez, quien sostuvo que son “conscientes del papel relevante que tiene en el territorio de la Comunidad Foral implantar políticas de apoyo a la producción ecológica, ya no solo para fomentarla a base de ayudas sino para impulsar la formación y el asesoramiento técnico”.

Estas dos cuestiones “permiten a nuevos operadores incorporarse a este modelo de agricultura de forma viable, fomentar el consumo de estos alimentos en la ciudadanía para que este sector se desarrolle y reforzar la confianza de la ciudadanía en este modelo de producción”, ha manifestado. Actualmente, en Navarra trabajan 815 operadores.

Tras someterse el proyecto de decreto foral a consulta pública previa y a participación ciudadana, el texto pasó por el Pleno del Consejo de CPAEN-NNPEK y posteriormente se sometió al proceso de exposición pública en julio de 2021. Hubo 17 alegaciones, y diversos planteamientos se recogieron en la norma.