“No vamos a concertar centros que separen por género”. Así lo ha asegurado el consejero de Educación del Gobierno vasco Jokin Bildarratz tras el consejo de Gobierno. Y es que “no entendemos que cabe financiación en los centros que separan al alumnado por género”.
Hasta ahora una sentencia del Tribunal Constitucional no permitía retirar las partidas económicas a estos centros, sin embargo, la vigente ley educativa estatal (LOMLOE), la orden autonómica sobre conciertos, y el pacto educativo alcanzado el año pasado en el Parlamento Vasco ha abierto la puerta a tomar esta medida.
Actualmente hay seis centros en la CAV que segregan por sexo. Arangoyen en Bilbao, Gaztelueta en Leioa, Ayalde y Munabe en Loiu, Eskibel en Donostia y Erain en Irún, todos ellos próximos al Opus Dei. En todos ellos empiezan a segregar por sexo a partir de Primaria.
Sin embargo, la normativa actual no lo permite. Ya que en la Lomloe queda recogido que no puede haber financiación a colegios que separen por sexos, “y eso es lo que vamos a aplicar”, ha subrayado Bidarratz.
El consejero ha destacado, asimismo, que ya se había anunciado que para el próximo curso escolar, el Gobierno vasco tenía previsto cambiar los criterios, de acuerdo a lo que establece la normativa estatal y autonómica vigente, de los conciertos educativos.
En este sentido, y aunque no ha precisado las etapas concretas en las que se aplicará esta medida ni la fórmula exacta a través de la que se llevará a cabo, explicó que el Gobierno ya ha trasladado a los seis centros que en Euskadi siguen separando a los alumnos por sexo que el Ejecutivo autonómico “no puede admitir y no va a concertar con centros que separen por género”.
“No entendemos que quepa concierto alguno con centros que separan por género”, ha reiterado. En la misma línea, ha afirmado que puede “entender que haya familias que piensan que debe haber separación”, pero que lo que no es comprensible es que una administración pública “tenga que financiar” a los colegios que aplican un sistema de este tipo.
La medida anunciada por Bildarratz va por el mismo camino de la decisión que adoptó el Gobierno de Navarra ayer: a partir de septiembre, el Gobierno dejará de financiar con dinero público a los centros privados que segregan por sexo a los alumnos de bachillerato.