El Gobierno vasco destinará este año 1,2 millones de euros a subvenciones a fondo perdido para impulsar la creación de cooperativas agroalimentarias y paliar así los "inconvenientes" de la "elevada atomización del sector", que se han visto agravados por las consecuencias de la guerra en Ucrania.
El Boletín Oficial del País Vasco (BOPV) publica este martes una orden firmada por los consejeros de Alimentación, Desarrollo Rural, Agricultura y Pesca, Amaia Barredo, y de Economía, Trabajo y Empleo, Mikel Torres, en la que se regula la concesión de estas ayudas recogidas en el Programa Kooperatu.
Las ayudas, que podrán solicitarse a partir de este miércoles y durante un mes, tendrán un límite máximo de 280.000 euros para las entidades que se dedican a la producción primaria de producto agrícola y de 300.000 euros para el resto de entidades agroalimentarias.
El objetivo es reducir la "elevada atomización" de las industrias alimentarias vascas y para ello el Gobierno Vasco ve necesario "renovar esfuerzos de integración empresarial, como pilar fundamental para la sostenibilidad del sector".
La creación de cooperativas agroalimentarias "favorecerá su competitividad", así como su modernización e internacionalización.
En la actualidad el sector cooperativo agroalimentario de Euskadi está compuesto por 72 entidades que el año pasado facturaron 400 millones de euros.