El Gobierno vasco ha abierto en lo que va de año unos 90 expedientes sancionadores por infracciones detectadas en viviendas de uso turístico (VUT), en su mayoría de carácter grave, lo que conlleva una sanción mínima de 10.000 euros.
El director de Turismo y Hostelería del Gobierno vasco, Goyo Zurro, ha dado a conocer el dato durante la presentación en Bilbao de un informe sobre las viviendas y habitaciones de uso turístico en Euskadi en base a los anuncios en plataformas digitales.
Zurro, que ha considerado que este mercado se está estabilizando, ha anunciado que entre las actuaciones que va a desarrollar el Gobierno vasco en próximas fechas, se encuentra la intensificación de las campañas de inspección y control para detectar posibles irregularidades.
Según ha precisado, la mayoría de los expedientes sancionadores incoados están relacionados con infracciones graves en este tipo de alojamientos por operar de manera clandestina, anunciarse como vivienda completa cuando se oferta una habitación o anunciar más plazas que las declaradas, entre otros motivos.
Del total de 5.758 actividades de alojamiento turístico registradas en Euskadi, 4.384 corresponden a viviendas o habitaciones turísticas, en las que se ofertan 19.610 del total de 78.270 plazas.
ANUNCIOS EN PORTALES
El estudio elaborado por el Gobierno vasco, en cumplimiento de un acuerdo del Parlamento Vasco, se ha basado en un "barrido" mediante una herramienta informática de los anuncios sobre viviendas y habitaciones turísticas de Euskadi incluidos en los portales de Airbnb, Tripadvisor y Vrbo.
El trabajo se ha realizado en el segundo semestre del año y se ha centrado en varios municipios vascos, entre ellos las tres capitales.
Según el registro del Gobierno Vasco, en 2022 se ha producido un aumento de un 18,5 % en las altas de viviendas y habitaciones de uso turístico desde 2019.
El aumento mayor (48 %) se ha producido en Bizkaia (en Bilbao han crecido un 35,7 %), mientras que en Gipuzkoa se ha detectado un leve descenso del 0,1 %, más notable en San Sebastián, donde el número de estos alojamientos han bajado un 8 %.
En Araba también hay un 40 % más de este tipo de alojamientos, aunque su volumen es escaso a nivel general.
Si bien en 2019 Gipuzkoa albergaba el 61 % de la oferta, en 2022 su peso ha descendido 10 puntos, mientras que Bizkaia ha incrementado su peso hasta un 44 % desde un 35 % y Araba ha pasado de un 4 a un 5 %.
El estudio también recoge una estadística del INE, que evidencia que porcentualmente Euskadi (0,39 %) se encuentra sustancialmente por debajo de la media de viviendas de uso turístico en el Estado español (1,13 %).
CRECIMIENTO TRAS EL COVID
Según el informe del Gobierno Vasco, en 2022 y tras el cese de las restricciones más importantes destinadas al control de la pandemia de covid-19, el número de anuncios de estos alojamientos en plataformas ha crecido un 3,55 % en relación a 2019, aunque el de anuncios "únicos", sin aparecer duplicados en varias plataformas, ha descendido un 7 % hasta 2.781.
De lo analizado en estos anuncios, se refleja un descenso de los anuncios de viviendas sin número de registro en un 14 % hasta contabilizar 1.302 viviendas o habitaciones de uso turístico en los que no aparece este dato obligatorio.
Zurro ha explicado que la presencia del número de registro en los anuncios de las plataformas es un requisito legal obligatorio y su ausencia se puede deber a que la vivienda sea clandestina, pero también a que no se refleje por desconocimiento del usuario u otros motivos.
En 2022, los anuncios de alojamientos con número de registro son superiores (53 %) a los que no cuentan con él, situación que en 2019 era a la inversa, según el representante del Gobierno vasco, quien ha considerado que estos datos indican que "el camino parece que es el correcto" en este ámbito.
El estudio de los anuncios en las plataformas, refleja también una distribución de las viviendas y habitaciones turísticas hacia destinos de menor dimensión como Zarautz, donde la oferta anunciada crece un 65 % desde 2019, o Bermeo, que lo hace en un 73,6 %. Sin embargo, la de Hondarribia decrece un 47 % en el período.