La ayuda de 300 euros para apoyar los procesos de emancipación de jóvenes de entre 25 y 29 años podría entrar en vigor a principios del próximo año, después de que este martes el lehendakari, Iñigo Urkullu, haya firmado el decreto de aprobación previa que la regula.
Urkullu ha dado el visto bueno a este trámite del programa Emantzipa y ha informado de ello al Consejo de Gobierno, reunido como cada martes.
Siguiendo el procedimiento y calendario previstos ha quedado aprobado, con carácter previo, el texto articulado del decreto que aborda las condiciones generales de la ayuda, los requisitos que deben cumplir las personas beneficiarias, el marco de compatibilidad con otras ayudas, su cuantía, el número máximo de personas beneficiarias por vivienda o el procedimiento de otorgamiento, entre otras cuestiones.
Requisitos para acceder a la ayuda
El Programa Emantzipa contempla una ayuda económica directa de 300 euros al mes durante dos años para jóvenes de 25 a 29 años, que hayan iniciado o vayan a iniciar un proceso de emancipación y cuya renta anual se sitúe entre los 3.000 y los 28.000 euros.
La mayoría de las personas jóvenes en Euskadi se emancipa después de los 30 años. Entre los 25 y 29 años, el porcentaje de personas emancipadas se queda por debajo en el 32,8%.
El objetivo de este programa es reducir la edad media de emancipación por debajo de los 28 años y aumentar la tasa de emancipación hasta el 50 % para 2030.
Las personas beneficiarias deberán estar empadronadas en Euskadi el año previo a la solicitud y acreditar tres años de empadronamiento en los diez últimos. En el caso de jóvenes que se emancipen en pareja o convivencia con otras personas se aplicará una minoración de la cuantía que les pudiera corresponder por separado.
Batería de medidas
A esta ayuda de 300 euros al mes durante dos años para jóvenes de 25 a 29 años, se unen la ayuda de 200 euros al mes por descendiente hasta los tres años, las ayudas al alquiler del Programa Gaztelagun que pueden llegar hasta los 300 euros al mes, la gratuidad de la etapa 0-2 años de las haurreskolak, las deducciones fiscales por descendiente y las medidas que ya están en vigor en materia de conciliación.
Todas estas medidas van dirigidas a posibilitar los procesos de autonomía de los jóvenes y facilitar sus proyectos de vida, ha explicado el portavoz del Gobierno vasco, Bingen Zupiria.
A estas actuaciones se unen las medidas orientadas a fomentar el empleo y la formación para el empleo, mediante el Plan de Choque de Empleo Juvenil, a facilitar el acceso a la vivienda de los jóvenes, el adelanto de la edad para acceder a la RGI o el desarrollo de actuaciones como el Programa Trapezistak, de acompañamiento a jóvenes sin red familiar para evitar su exclusión social.
Este conjunto de medidas forman parte de la Estrategia Vasca 2030 para favorecer la emancipación juvenil, que fue aprobada por el Gobierno vasco el pasado 21 de marzo.