La implantación de una tasa turística en Euskadi está cada vez más cerca. De la misma forma que lo hacen ya otros muchos territorios, como Catalunya o Baleares, o ciudades como París, el Gobierno vasco analiza ya la forma en la que aplicará este impuesto a las estancias de los turistas que se acercan a la CAV. Aunque no hay aún un plazo exacto para implantar esta tasa, el consejero de Turismo, Comercio y Consumo, Javier Hurtado, ha explicado este martes que a día de hoy "se dan las condiciones para implementar un tributo a las estancias turísticas", por lo que se ha comprometido a presentar en el plazo de 6 meses una propuesta consensuada con el Departamento de Hacienda y el resto de instituciones sobre los detalles para empezar a aplicar esta medida.
"Es justo que quien venga a disfrutar de Euskadi contribuya también a la mejora de Euskadi", ha manifestado el consejero a la hora de reivindicar la necesidad de implantar esta tasa. Ha querido dejar claro, no obstante, que no se pretende "retraer la entrada de turistas", sino mejorar Euskadi como destino y a la vez aprovechar el dinero recaudado para impulsar "políticas turísticas con impacto en los municipios y en la calidad de vida de la ciudadanía". De hecho, ha manifestado que este tipo de tributo está instaurado en 27 países europeos "y no hay ningún estudio que diga que desincentive" la llegada de viajeros.
Mayor control sobre los pisos turísticos
Además, Javier Hurtado ha anunciado que se elaborará una nueva Ley de Turismo que incluirá conceptos como "la concienciación sobre la sostenibilidad turística", avanzará hacia un turismo inclusivo y accesible e incorporará el Código Ético del Turismo. Ha subrayado que esta nueva norma permitirá adaptarse al Reglamento Europeo de Alquiles de Corta Duración, lo que permitirá un mayor control de las viviendas y habitaciones para uso turístico, al obligar a las plataformas de internet -que hasta ahora "han actuado con impunidad"- a compartir sus datos con la Administración.
El consejero ha insistido que el objetivo fundamental de la legislatura en materia turística será profundizar en el modelo que defiende el Gobierno vasco, y que pasa por la desestacionalización, la diversificación de la oferta y la captación del turista internacional. La idea es "potenciar" los efectos positivos del turismo y "combatir" los negativos, ha resumido.
Impulso al comercio
El comercio ha ocupado también un lugar destacado en la intervención este martes de Javier Hurtado en el Parlamento para esbozar las líneas estratégicas de su Departamento para esta nueva legislatura. De hecho, turismo y comercio suponen el 18% del PIB vasco y el 24% del empleo en Euskadi, con más de 247.000 trabajadores.
Hurtado ha subrayado la necesidad de seguir concienciando a la sociedad sobre la importancia de comprar en tiendas de Euskadi. "Si de verdad creemos en la importancia de comercio local y si de verdad defendemos nuestros servicios públicos debemos demostrarlo comprando en los negocios que paguen impuestos aquí", ha destacado.
"El precio que no paguemos hoy, lo pagaremos más caro mañana", ha advertido, al tiempo que ha reivindicado un "liderazgo público" para favorecer las tres transiciones que debe hacer el comercio de Euskadi: medioambiental, sociodemográfica y digital.
Ha prometido asimismo una nueva Ley de Comercio "adaptada a los cambios en los hábitos de consumo y alineada con las nuevas normativas española y europea". El actual marco normativo, ha recordado, es "previo al auge del comercio electrónico, de la digitalización y de la sostenibilidad como aspecto clave".
El consejero también tiene intención de "evaluar y optimizar" las ayudas actuales al comercio. Así, se creará un nuevo programa para el emprendimiento orientado al relevo generacional y desaparecerán las Ayudas a las Oficinas Técnicas de Comercio, al ser sustituidas en 2025 por Merkasaretza, la Red Vasca de Puntos de Asistencia Comercial.
Refuerzo al papel de Kontsumobide
En Consumo, Hurtado se ha comprometido a reforzar el papel de Kontsumobide, que vigilará que se cumplan los derechos de los consumidores, impulsará las "conductas respetuosas de las empresas", incrementará sus acciones formativas y seguirá dando publicidad a las infracciones más graves porque "a muchas empresas les pesa más la reputación que las sanciones".
En el área de comercio se trabaja además en sendos decretos para regular los derechos del consumidor en la compraventa de coches nuevos y de segunda mano, y del usuario de centros privados de enseñanzas no regladas.