El Grupo Parlamentario Vasco en el Senado preguntará a la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana si está propiciando los avances suficientes para garantizar la accesibilidad universal en los servicios ferroviarios de cercanías en Euskadi. En la sesión de control del próximo martes, Maribel Vaquero trasladará a la ministra Raquel Sánchez la reivindicación que visibiliza María Luisa Goikoetxea, vecina de Orduña que, tras las secuelas físicas producidas por un ictus, quería autonomía e independencia para acudir a las sesiones de rehabilitación en Bilbao, algo que era imposible de conseguir en tren por la falta de vagones adaptados para favorecer la accesibilidad a personas con movilidad reducida o que tienen que utilizar sillas de ruedas o, como en su caso, que se desplazan con un scooter adaptado.
Ante esa situación, Maria Luisa Goikoetxea comenzó, a finales de 2015, su particular lucha a favor de la accesibilidad plena de los trenes e impulsó, para ello, diferentes iniciativas, entre ellas una campaña de recogida de firmas a través de change.org que reunió 121.000 apoyos y que entregó en la sede del Ministerio de Fomento de Madrid junto al artista El Langui, encabezó manifestaciones de protesta, escribió un libro relatando su experiencia e incluso llegó a volar en ultraligero para demostrar que para una persona en su situación era más fácil volar que montar en un vagón de la línea C3, la que enlaza Orduña con Bilbao.
Y el 10 de julio de 2018 fue un día muy especial e importante para ella puesto que Renfe puso en marcha y activó la prueba piloto para que pudiera subir y bajar al tren a través de un sistema de rampas manuales para facilitar el acceso de los andenes a un vagón. Sin embargo, 5 años después, sigue siendo la única beneficiaria de este servicio de plataformas móviles implantado en la línea C3, una realidad que hace a María Luisa sentirse “defraudada, porque el objetivo era que fuera para todo el que lo necesitara”.
Así se lo ha hecho saber, a través de un escrito por email, al presidente de la compañía ferroviaria en el que, tras un resumen de los antecedentes de su caso y sus campaña reivindicativa, explica que “se me ofrece una prueba piloto a la que accedo con gran ilusión, esperando que al finalizar sea para todo el que lo necesite” y, aunque resalta y destaca que “me he sentido exquisitamente tratada”, también lamenta que la prueba piloto se ha “extendido más de lo deseable”, hasta el punto de que, en la actualidad, solo puede utilizar ella el servicio de rampas móviles.
Reunión con senadoras
De nuevo en la lucha por el derecho a una accesibilidad universal a los trenes, el pasado lunes María Luisa Goikoetxea se reunió en Orduña con las senadoras del Grupo Parlamentario Vasco, Maribel Vaquero, Nerea Ahedo y Rosa Peral. Tras ese encuentro y visitar la estación de Renfe de la ciudad, el apoyo del grupo a la reivindicación de la orduñarra llegará en forma de pregunta a la titular del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana. Para Goikoetxea la solución es sencilla, tan solo requiere voluntad. “Sé, por experiencia propia, que en Cataluña existen unidades realmente adaptadas. Yo misma he podido viajar en ellas. Y me consta que en otras Comunidades, también hay”.
Por ello, solicita a Renfe que “una de esas unidades se reincorpore a la línea Orduña-Bilbao. Con una sola sería suficiente porque si hace constantemente el trayecto de ida y vuelta las personas con movilidad reducida nos adaptaríamos a los horarios y frecuencias establecidos”.