El Helvetia Anaitasuna encara a partir de este sábado su 12ª temporada en la Liga Asobal y lo hace arrancando en casa, en La Catedral, a partir de las 19.00 horas y contra un rival del que poco se fía, el Club BM Cisne, debutante en la máxima categoría.
Tras una pretemporada en la que se ha engrasado bien la maquinaria, con victorias tan motivantes e ilusionantes como ante el Kielce –subcampeón de Europa–, ahora es el momento de ver al nuevo proyecto en un partido oficial.
Anaitasuna mantiene su columna vertebral, donde jugadores como Ibai Meoki, Antonio Bazán o el capitán, Carlos Chocarro, son indiscutibles, y demuestran temporada tras temporada el peso que tienen no sólo en el vestuario, sino en el juego del equipo. Un plantel al que se le unirán esta vez cuatro caras nuevas: la del central Xavi Castro, el lateral portugués Joao Pinto, el primera línea Julen Elustondo y el también lateral Ernesto Goñi, jugador con proyección en el primer equipo, pero que jugará principalmente en el filial de Primera Nacional. A todos ellos, además, hay que sumarle el salto definitivo que da el extremo zurdo Mikel Redondo, ya forjado en la Liga Asobal, pero que ocupará definitivamente el hueco dejado por Xabier Etxeberria.
Con estos mimbres, y bajo la batuta por tercera temporada consecutiva de Quique Domínguez, el Helvetia saltará este sábado por la tarde a la pista pamplonesa con el objetivo de sumar sus dos primeros puntos. El técnico pontevedrés se enfrenta al equipo de su tierra, un rival del que poco se fía precisamente por su condición de recién llegado a la categoría.
El Club BM Cisne, con la ilusión y motivación extras de los debutantes, tratará de amarrar la primera victoria en la Liga Asobal, competición en la que jugará por segunda vez. Javier Márquez es quien maneja ahora los mandos del conjunto gallego en detrimento de Jabato, que dejó el club tras seis años al frente.
El Cisne ha compensado la juventud de su plantel con fichajes como el portero Kilian Ramírez, procedente del Teucro, o el primera línea caboverdiano Gualther Furtado, si bien se ha fijado también en jugadores prometedores como Gabriel Cavalcanti, de 19 años, que jugará cedido desde el Benfica.
Quique Domínguez tiene claro que el objetivo del Helvetia esta temporada pasa por “crecer, mejorar, que haya un proceso de crecimiento continuo y constante a lo largo de todas las semanas, que nos exijamos mucho y que acabemos lo más arriba posible. Somos muy ambiciosos y queremos hacer una gran campaña”. El preparador gallego advierte de que el Cisne “es un equipo que está en condiciones de competir y por ello será un rival difícil. No han cambiado el modelo de juego y mantienen unas señas de identidad bastante claras, con un ritmo muy alto y muchas transiciones”, avisa.