Las fresas son una de las frutas más apreciadas de la temporada, no solo por su sabor dulce y refrescante, sino también por su versatilidad en la cocina. Se pueden disfrutar solas, con nata, azúcar, chocolate o incluso combinadas con zumo de naranja. Además, son un ingrediente estrella en postres, mermeladas caseras y tartas. Sin embargo, a pesar de su popularidad, también son conocidas por su corta vida útil, ya que tienden a estropearse rápidamente si no se almacenan correctamente.
Para solucionar este problema, Lidl ha lanzado un práctico recipiente diseñado específicamente para conservar las fresas frescas por más tiempo. Este innovador organizador promete alargar la vida de las frutas y verduras, reduciendo la humedad que puede provocar su deterioro antes de tiempo.
Un diseño pensado para mantener la frescura
El organizador de Lidl tiene un diseño que facilita la conservación de las fresas y otros alimentos perecederos. Su estructura consta de dos compartimentos: un recipiente principal y una cesta interna que se mantiene ligeramente elevada. Esta disposición evita que las fresas estén en contacto con el agua acumulada en el fondo, lo que ayuda a prevenir la formación de moho y la descomposición prematura.
Además, el recipiente está equipado con una tapa que incorpora una válvula de vacío corredera. Esta función permite regular la circulación del aire dentro del contenedor, asegurando unas condiciones óptimas de almacenamiento. Si se mantiene cerrada, la humedad del interior se conserva mejor, mientras que al abrirla, se favorece la ventilación de los alimentos.

Recipiente portalimentos.
Ideal para más que solo fresas
Si bien este innovador recipiente ha sido destacado por su capacidad para conservar fresas frescas por más tiempo, su uso no se limita únicamente a esta fruta. Verduras como zanahorias, brócoli y lechuga también pueden beneficiarse de su diseño, ya que el sistema de ventilación y drenaje ayuda a mantenerlas crujientes y en buen estado.
Otro aspecto destacable es que la cesta interna es extraíble, lo que permite mayor flexibilidad en su uso. Se pueden almacenar diferentes tipos de alimentos sin problema, ajustando el espacio según las necesidades.

Verduras en la nevera.
Una opción accesible y fácil de usar
Uno de los puntos fuertes de este organizador es su precio asequible. Por solo 5,99 euros, se puede adquirir en las tiendas de Lidl, convirtiéndose en una opción económica para mejorar la conservación de los alimentos. Además, su limpieza es muy sencilla, ya que tanto el recipiente como la cesta pueden lavarse en el lavavajillas, asegurando su reutilización de forma práctica e higiénica.
Este tipo de soluciones no solo ayudan a mantener los alimentos frescos por más tiempo, sino que también contribuyen a reducir el desperdicio de comida en los hogares. Muchas veces, frutas y verduras se deterioran antes de ser consumidas, y con este sistema, se consigue prolongar su vida útil, evitando que terminen en la basura antes de tiempo.

Lavar las fresas en el fregadero con ayuda de un colador para escurrir el agua.
Cómo limpiar las fresas adecuadamente
Para disfrutar de las fresas frescas y sabrosas, es fundamental limpiarlas correctamente antes de consumirlas. Aquí te dejamos algunos consejos para asegurarte de que tus fresas estén limpias y listas para disfrutar:
- No las laves hasta el momento de usarlas: Las fresas son altamente perecederas y el agua puede acelerar su deterioro. Es mejor lavarlas justo antes de consumirlas o utilizarlas en recetas.
- Lava con agua fría: Coloca las fresas en un colador y enjuágalas suavemente bajo un chorro de agua fría. Esto ayudará a eliminar la tierra, los pesticidas y otros contaminantes.
- Utiliza una solución de vinagre: Si deseas una limpieza más profunda, puedes preparar una solución de vinagre y agua (una parte de vinagre por tres partes de agua). Sumerge las fresas en esta mezcla durante unos minutos, luego enjuágalas con agua fría. El vinagre no solo limpia, sino que también puede ayudar a eliminar bacterias.
- Seca con cuidado: Después de lavar las fresas, sécalas suavemente con un paño limpio o con papel de cocina. Evita frotarlas con fuerza para no dañar la piel.
- Retira las hojas después de lavar: Es recomendable quitar las hojas y el tallo después de limpiar las fresas. Esto evita que el agua se acumule en el interior y prolonga su frescura.
Siguiendo estos sencillos pasos, podrás disfrutar de tus fresas de manera segura y deliciosa. Además, al mantenerlas limpias, contribuirás a una mejor conservación en el innovador recipiente de Lidl.