Un Izarra con ganas de resarcirse de los tres últimos encuentros que encadena sin conocer la victoria recibe este domingo (17.00 horas) a un Logroñés B que encadena cuatro derrotas de manera consecutiva, con la idea de conseguir el primer triunfo de 2023 en Merkatondoa.
El técnico del equipo albiazul, Álex Huerta, reconoce que el partido ante el Alfaro no fue "brillante, pero creo que el empate lo dimos como bueno. Teníamos que cortar la dinámica y sabíamos que el Alfaro es un equipo fuerte. En este momento cualquier rival aprieta y tenemos que ser conscientes de que cualquier punto, aunque no nos guste, nos puede dar el objetivo".
El numantino asegura que el equipo tiene "además, esa espina clavada de que en 2023 no hemos ganado todavía en casa. Hemos sacado las victorias a domicilio, y aunque hemos sacado empates difíciles y dando buena imagen, en el último ante el Utebo no estuvimos bien. Tenemos ahora el déficit de la solvencia en Merkatondoa, y queremos dar una alegría a nuestra afición y eso pasa por hacerlo ya y no demorarlo más".
El preparador del Izarra es consciente de las necesidades "de los equipos de abajo en sumar, y eso les hace más peligrosos. En febrero y marzo aprietan para intentar salir, pero a medida de que avanza la competición igual se dejan llevar. La UDL vimos su potencial en la primera vuelta. Quizás se está viendo perjudicado por la situación del primer equipo pero le tenemos todo el respeto". Para el partido, Huerta recupera a los tres sancionados y tiene la duda de Gorka Laborda.