El juez Manuel Piñar ha negado este jueves ante el Juzgado de Instrucción número 8 de Granada ser el autor de las publicaciones en redes sociales por las que está siendo investigado por un supuesto delito de incitación a la discriminación y al odio, tras la denuncia que en este sentido interpuso el abogado de Juana Rivas, a la que este magistrado condenó por sustracción de menores.
El magistrado ha negado así, a preguntas del juez instructor, la autoría de ninguna de las publicaciones en Facebook que se incluyen en la denuncia y se ha acogido a su derecho a no declarar, según han informado a Europa Press desde el despacho Aránguez Abogados. Según estas mismas fuentes, el juez habría enmarcado esta denuncia en una "persecución" hacia su persona.
Tras revisar hace unos meses el contenido de las publicaciones del juez que se recogen en la denuncia, la Audiencia de Granada sostuvo que algunas de ellas contienen "epítetos, calificativos o expresiones que se refieren de forma despectiva a ciertos grupos étnicos, razas o nacionales de ciertos países (gitanos, negros, moros, chinos), los cuales, en caso de haber tenido la necesaria trascendencia pública, pudieran comportar una incitación a la discriminación o al odio contra esos colectivos".
Por ello, estimó parcialmente el recurso de la Fiscalía y revocó la decisión del juez instructor de archivar el asunto para que se practiquen las pruebas necesarias para esclarecer, no sólo la realidad de las "publicaciones" que se atribuyen al juez Piñar y su contenido; sino sobre todo su autoría y la trascendencia o proyección que hubieran podido tener.
La Fiscalía ha solicitado por su parte una batería de diligencias de investigación para acreditar, entre otros extremos, los contenidos de las presuntas publicaciones en redes sociales y esclarecer su autoría, estando pendiente que Facebook atienda a los requerimientos que se han realizado en este sentido.
El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) acordó el pasado verano el archivo del expediente que se le abrió al juez Piñar por este asunto. Concretamente, se analizó si los mensajes publicados en su perfil de Facebook suponían una falta muy grave de ignorancia inexcusable en el cumplimiento de los deberes judiciales, o una falta grave de falta de consideración respecto de los ciudadanos, extremos que fueron descartados por el órgano de gobierno de los jueces.