El juicio por el crimen de Castro, que dirime si Carmen Merino asesinó a su novio y entregó su cráneo a una amiga en 2019 en Castro Urdiales, ha terminado con la intervención del abogado de la acusada, que defiende su inocencia aunque reconoce un posible delito de encubrimiento.
El abogado pide la libre absolución y una pena por encubrimiento de forma subsidiaria en el informe final dirigido al jurado popular, que mañana comenzará sus deliberaciones sobre la culpabilidad de esta sevillana de 64 años, que no ha ejercido su derecho a la última palabra en el noveno día de juicio.
La defensa considera que no se ha podido acreditar "de qué y cómo murió" la víctima ni que le matara Carmen Merino, porque "la investigación fue peor que un desastre" y no se han explorado más posibles autores, por lo que debería empezarse "de cero".
Y aunque ha asegurado que "no atribuye el asesinato a nadie", ha dicho que la persona que tenía problemas económicos era "el hijo de Carmen Merino" y tenía "una actitud altamente sospechosa" respecto a Jesús Mari.
Para la defensa, "hay una tercera opción" aparte de la culpabilidad o la inocencia de Merino, ya que, según afirma, las pruebas que indican que la acusada descuartizó el cadáver, se hizo pasar por él enviando mensajes y entregó su cráneo a una amiga "no prueban que matara a Jesús Baranda", sino que "solo demostrarían el encubrimiento".
"Creo que esa posibilidad existe", ha razonado.
La Fiscalía, en el noveno día del juicio, ha mantenido la petición de 25 años de prisión por un delito de asesinato con alevosía y con agravante de parentesco, ya que la acusada y la víctima mantenían una relación sentimental y vivían juntos desde hacía siete años.
Además, pide que se indemnice por daños morales con 20.000 euros a cada uno de los dos hijos y al hermano de la víctima.
El fiscal ha sostenido que la acusada planificó la muerte de Jesús Mari y luego descuartizó el cadáver "movida por un interés económico".
Ha recordado que Merino buscó en internet, después de que Jesús Mari cambiara el testamento a su favor, "cuánto tiempo tarda en descomponerse un cadáver" y "si mi marido desparece ¿cobro la pensión?" y que hizo "acopio de Diazepam" en los meses anteriores a la muerte de su novio.
La acusación particular, que representa a los hijos, ha mantenido su petición de prisión permanente revisable y 70.000 euros.
Afirma que el testimonio de la acusada es "ciencia ficción" y sostiene que, después de que la acusada entregara a su amiga el cráneo de Jesús Mari -la única parte del cuerpo encontrada- alegando que eran juguetes sexuales y de que ésta abriera la caja, Merino no defendió su inocencia, sino que "agachó la cabeza".
"¿Creen que una persona que es inocente no se defiende?", ha resaltado la letrada de la acusación particular.