El local centenario de La Perla Vascongada ha encontrado relevo y cambia de rumbo 124 años después de que echara a andar como sastrería y tienda de telas, allá por 1898.
Y lo hace de la mano de Javier Moral, uno de los comerciantes con más presencia en el Casco Viejo. En las últimas semanas se están llevando a cabo en el interior las obras de reforma de la bajera para dar paso a un nuevo establecimiento del grupo Pavana Moda, la firma que se instaló en el Casco Viejo allá por 1997, y que amplía su oferta con un nuevo local en la calle Zapatería, una de las de más actividad comercial. Será el sexto comercio del grupo Pavana en la capital, y Javier Moral no avanza, de momento, el nombre que le va a poner. "No tengo claro si mantendré el cartel o si cambiaré el nombre", confiesa.
La noticia ya está circulando por el Casco Viejo, al ser La Perla Vascongada uno de los últimos negocios centenarios que echaron la persiana en la ciudad. Y ha sido bien recibida, porque en muchos casos ocurre que locales comerciales que cesan su actividad pasan años, incluso décadas, con la persiana bajada sin encontrar relevo. Un ejemplo, en la calle Zapatería también: todavía sigue cerrado desde hace más de 20 años Euskal Piel.
UN "CONCEPTO DIFERENTE" DE MODA MUJER
Javier Moral explica que "la idea es montar un concepto diferente de moda", exclusivamente de mujer, en un local de 120 m2 que llevan meses "redecorando" y "del que se está respetando su esencia y su antigüedad". Así, avanza que "va a ser algo muy especial, con muebles isabelinos", un proyecto con el que está muy ilusionado. "Ampliamos la oferta y seguimos apostando por el Casco Viejo, esta vez en la calle Zapatería". Será su sexto establecimiento, que se suma a los otros cinco que siguen en marcha: Le temps des cerises, Relish, García Jeans, Freeman y Pavana, todos ellos en la calle Mayor.
LA PERLA CERRÓ EN 2019
Como ya avanzó en su día este periódico, un problema de salud de un familiar fue el detonante en 2019 del cierre de La Perla Vascongada. Un año después, su propietario actual se planteó volver, pero llegó la pandemia y ya fue imposible. No es el único. En la misma calle anunció su adiós hace unas semanas la marca Zergatik, y confecciones La Madrileña también colgó el cartel de cierre, en este caso motivado por el fallecimiento de un familiar. Pero hay otros que continúan en la calle Zapatería. Basoco celebra su medio siglo, y otras míticas zapaterías como Goñi y Ayestarán siguen en activo.
La Perla Vascongada, el negocio de Rufino Saralegui fue durante décadas uno de los muchos de la Pamplona de antaño que vendían telas al por menor y confeccionaban trajes a medida.