El regreso a la competición del Lointek Gernika Bizkaia, que dejó una derrota entendible en el derbi ante el IDK Euskotren, se ha visto de nuevo interrumpido ya que el duelo que debía jugar hoy en La Seu d'Urgell ante el Cadí fue aplazado ayer mismo por un brote de covid en el equipo catalán. Este partido se tenía que haber jugado inicialmente el 4 de enero, pero esa fecha se usó para recuperar el encuentro europeo ante el Mersin y ahora ha sido trasladado al 12 de febrero, a la vuelta del parón de selecciones.
Este es uno de los choques que el conjunto gernikarra tiene aún pendientes y que influyen en la clasificación para la Copa. Los dos siguientes serán el del domingo en Logroño ante el Campus Promete y el del próximo miércoles 2 de febrero ante el Leganés, que supondrá reencontrarse con el público de Maloste después de casi dos meses. De esta manera, el Lointek Gernika podrá ya ponerse al día y saber si estará en la cita de Valencia de finales de marzo. En este sentido, la clasificación acumulada que ofrece la FEB poco aporta porque solo un equipo el Casademont Zaragoza ha podido disputar las 18 jornadas que se han consumido hasta la fecha y son 19 los partidos pendientes.
El conjunto vizcaino llegó al final de la primera vuelta con cinco derrotas, las mismas que el Cadi La Seu que ocupaba la cuarta plaza y, por tanto, la posición de cabeza de serie. El duelo entre ellos será clave, siempre que el Lointek Gernika logre sacar adelante sus dos próximos compromisos. En todo caso, con una victoria más en este trío de encuentros sellara virtualmente el billete copero. Para más adelante, quedará recuperar en un calendario que pasa muy rápido los tres partidos de la segunda vuelta que no ha podido jugar: contra el Gran Canaria, el Tenerife y el Avenida.